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La operadora británica Vodafone ha caído en bolsa un 4,3% en el día en el que ha presentado sus resultados y en el que se ha conocido la salida de su consejero delegado, Vittorio Colao, después de 10 años en el cargo. Colao será sustituido, a partir del próximo mes de octubre, por el actual director financiero, Nick Read.
La empresa ha anunciado su decisión con un comunicado remitido a la Bolsa de Valores de Londres. Colao dejará su puesto el próximo 1 de octubre y su sucesor será nombrado consejero delegado designado a partir del próximo 27 de julio, fecha en la que se celebrará la reunión anual de los accionistas de Vodafone.
"Tras unos resultados positivos, uno esperaría que los mercados reaccionaran comprando acciones de Vodafone. Sin embargo, los inversores claramente están teniendo una visión más tenue sobre las perspectivas de la compañía ante la salida de su CEO durante 10 años", señala Artjom Hatsaturjants, experto de Accendo Markets.
Vodafone ha informado este martes de que su beneficio atribuido anual hasta el 31 de marzo fue de 2.439 millones de euros frente a las pérdidas de 6.297 millones de euros en el mismo periodo del año anterior. El presidente de Vodafone, Gerard Kleisterlee, ha agradecido a Colao su trabajo, y se ha referido a él como un "líder ejemplar" y un "visionario estratégico" que ha supervisado la "dramática transformación de Vodafone".
"Si bien las noticias de sucesión pueden haber tomado al mercado desprevenido, parece ser un cambio ordenado dentro del grupo", añaden desde Accendo. "Read, como hombre de números, habrá estado muy involucrado en el reciente gasto europeo de Vodafone (la compra de activos de Libergy Global). Aun así, los inversores se muestran escépticos sobre si el sustituto podrá administrar las compras en Europa central y oriental para impulsar el crecimiento futuro, no sólo a medio plazo, sino también a largo plazo", añaden.
"Después de 10 años de estabilidad bajo el mando de Colao, Vodafone se está embarcando potencialmente en aguas inexploradas bajo la guía de un ejecutivo que ha estado con la compañía solo 4 años y tiene menos experiencia de la que los mercados hubieran satisfecho", concluye Artjom Hatsaturjants.