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La subida de los alquileres está despertando las ideas de los bancos para aumentar su oferta de productos. Si hace unos meses Santander ofrecía condiciones especiales para avalar los alquileres de los jóvenes, ahora Unicaja se une con una oferta similar. Ambas permiten a sus clientes menores de 31 y 35 años, respectivamente, acceder a avales para su alquiler de hasta 10.000 euros a cambio de una comisión que va desde los 10 euros al mes.
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En los contratos de alquiler es habitual que los arrendadores pidan a sus inquilinos garantías de que se harán cargo del coste durante el tiempo que habiten sus viviendas.
Para ello, al margen de requerir que los arrendatarios tengan un contrato de trabajo indefinido y una nómina de un importe mínimo, algunos caseros solicitan un aval o bien de otro particular o bien bancario para asegurarse de que alguien se hará cargo del abono del alquiler aunque el inquilino incurra en impago.
Las entidades ofrecen este servicio desde hace tiempo, pero ahora algunas están centrando sus esfuerzos en los jóvenes, que en España son los que más viven de alquiler ante las dificultades para acceder a una vivienda en propiedad.
Unicaja ha sido la última en apuntarse. La entidad ofrece a clientes entre 18 y 35 años un aval para un periodo de entre un año y tres a cambio de una comisión que asciende al 1% trimestral del importe concedido siempre que no sea necesaria una intervención notarial. Así, el coste sería de unos 10 euros al mes para un aval de 3.000 euros. El producto se enmarca en su oferta para la emancipación de los jóvenes, que comprende también hipotecas y créditos en condiciones especiales para este rango de edad, así como un préstamo para la compra de vehículos.
En el caso de Santander, la propuesta va dirigida a jóvenes de entre 18 y 31 años, que son el target de su estrategia SmartBank. La entidad ofrece avales a cambio de una comisión desde 12 a 44 euros al mes, dependiendo del importe garantizado: hasta 2.000 euros (coste de 12 euros mensuales), hasta 5.000 euros (22 euros) o hasta 10.000 euros (44 euros). La comisión solamente se paga a partir de la cuarta cuota, dado que las tres primeras no tienen coste.
La estrategia de Santander, además, incluye préstamos para pagar la fianza que el casero exige para alquiler el piso al inquilino, que en algunos casos puede llegar a las tres mensualidades y que puede requerir un fuerte desembolso para el arrendatario.
Las ofertas de ambas entidades no incluyen comisión por dar de alta el producto y requieren que el cliente pase por la oficina para completar la contratación del aval. En ambos casos, además, el importe avalado no podrá superar el importe máximo que tenga preconcedido el cliente, una cantidad que calcula el banco basándose en determinados parámetros que conoce del mismo.
