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La textil Under Armour está siendo investigada en Estados Unidos por sus prácticas contables. Las pesquisas las están realizando dos organismos federales, el Departamento de Justicia y la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por sus siglas en inglés). Tras conocerse esta noticia, las acciones de la compañía se han desplomado un 18% en Wall Street.
Ambas organizaciones se han coordinado para llevar a cabo una investigación criminal, de acuerdo con el diario The Wall Street Journal. A través de un comunicado emitido este domingo, Under Armour confirmó estos hechos, aunque señalo que sus prácticas contables y las divulgaciones son acordes a la ley. La compañía estadounidense lleva colaborando con ambos organismos desde julio de 2017, cuando se le empezó a solicitar documentos e informaciones.
UNA COMPAÑÍA CONVULSA
En los últimos años, los problemas en Under Armour son una tónica habitual. La competencia de otras marcas deportivas, como Nike, Adidas o Lululemon, lastran sus ventas, que cayeron un 2% interanual en 2018, hasta los 3.700 millones de dólares. Además, el consejero delegado y fundador, Kevin Plank, abandonará su puesto el próximo año, sustituido por el actual director de Operaciones, Patrik Frisk, que pretende compaginar el cargo de presidente ejecutivo con el jefe de marca.
En el ámbito social también ha habido polémica, después de que varios informes a los que hace referencia la CNBC, apuntasen que los empleados acudían con deportistas a clubes de 'striptease', pagando con las tarjetas de la empresa, para intentar convencerles de que vistiesen su marca.