Telefónica ha comenzado la hoja de ruta del dividendo con este martes 31 de mayo como primera fecha clave, ya que se trata del último día en el que se podrán adquirir en el mercado acciones del operador con derecho a percibir el dividendo de 0,148 euros por título. La acción de Telefónica ha tocado varias veces máximos anuales por encima de los cinco euros durante la sesión de este martes. En concreto, las acciones de la empresa española han sobrepasado en las dos primeras horas de sesión los 5,01 euros, su mayor nivel desde el 27 de febrero de 2020. Ha acabado cerrando la sesión con una subida del 2,16%.
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Telefónica repartirá este mes de junio el segundo tramo de su dividendo flexible a cuenta del ejercicio 2021 y con él se despedirá del 'scrip dividend', que permite al accionista elegir entre ser remunerado con títulos o en efectivo.
El operador tendrá que ampliar capital para responder a este dividendo por un máximo de 873,6 millones de euros con los que emitirá 189,1 millones de títulos de la firma, el equivalente al 3,2% del capital social, en el supuesto de que todos los accionistas optaran por las acciones.
En las últimas ocasiones, alrededor de dos tercios de los accionistas han optado por esta modalidad. Para conseguir una nueva acción de Telefónica a raíz del dividendo serán necesarios 31 derechos, mientras que el límite para vender al operador de vuelta los derechos y optar por el pago en efectivo está fijado en el 9 de junio.
El día 16, Telefónica abonará este tramo a los accionistas y anunciará la magnitud de la ampliación de capital necesaria para remunerar al resto de sus titulares.
Los títulos de Telefónica llegan al dividendo rozando los máximos anuales y con un incremento de valor por encima del 28% en lo que va de año.
Uno de los inversores institucionales más activos en las últimas semanas en Telefónica ha sido Criteria Caixa, que continúa construyendo su posición y controla ya el 1,33% del operador, según su última actualización de abril. Junto a Criteria, destacan en el capital de Telefónica tres grandes inversores institucionales: BlackRock, CaixaBank y BBVA. En el caso del mayor gestor de activos del mundo y la entidad catalana, ambos contaban a finales de año con posiciones del 4,48% y 4,49%, respectivamente, de acuerdo al informe anual de Gobierno corporativo de Telefónica. Esto les da derecho a percibir más de 37 millones de euros u ocho millones de títulos en el dividendo actual.
Por su parte, BBVA, con un 4,99% de las acciones, opta a recibir 41,65 millones de euros o, en su defecto, algo más de nueve millones de acciones de la compañía.
