La Comisión Europea ha dado este jueves luz verde a una ayuda pública de 850 millones de euros que el Gobierno francés ha previsto para la descarbonización de la producción de ArcelorMittal en Dunkerque (norte), tras concluir que el subsidio va en línea con los objetivos de la transición ecológica diseñada en la Unión Europea, lo que incluye romper con la dependencia de energías fósiles.
"La medida tiene un potencial de reducción de emisiones de CO2 de al menos 4,4 millones de toneladas al año", ha celebrado la vicepresidenta de la Comisión Europea encargada de Competencia, Margrethe Vestager, quien ha subrayado que el apoyo cumple también con las condiciones de una competencia justa.
Tras su análisis del expediente, Bruselas ha concluido que el plan de apoyo servirá para favorecer la producción de "acero ecológico" y respaldar iniciativas estratégicas para la UE como el Pacto Verde, la estrategia para el hidrógeno o los fondos de recuperación.
La ayuda, además, será un "incentivo", dice el Ejecutivo comunitario, porque de otro modo considera que sin ayudas públicas la metalúrgica no hubiera realizado las inversiones necesarias para cumplir con los objetivos medioambientales apuntados.
