Tubos Reunidos se desploma un 12% ante las dudas de su auditor sobre su viabilidad

En el informe de auditoría publicado por PwC sobre las cuentas del ejercicio 2017 de Tubos Reunidos, la auditora advierte de que, a 31 de diciembre de 2017, el pasivo corriente del grupo superaba a su activo en 3,8 millones de euros.

En opinión de PwC, la generación de los flujos de caja de Tubos Reunidos podría sufrir “tensiones de liquidez” según la evolución de diversos factores. Por un lado, el resultado de las medidas que el grupo ponga en marcha para seguir con su plan ‘Transforma 360’ y de su próximo plan de contención y de recortes de personal. Por otro, el tipo de cambio euro-dólar y los costes de las materias primas.

Así, la compañía podría tener dificultades para hacer frente a los compromisos de deuda que el grupo deberá afrontar durante 2018 y principios de 2019 que, según PwC, lo que demostraría “la existencia de una incertidumbre material que puede generar dudas significativas sobre la capacidad de la sociedad para continuar como empresa en funcionamiento”.

En lo que va de año, Tubos Reunidos acumula un desplome bursátil superior al 33%. El grupo anunció el pasado 28 de febrero unas pérdidas de 32,4 millones de euros durante el ejercicio 2017, lo que supuso reducir los números rojos en un 35%, al tiempo que anunció una reestructuración inmediata de su filial Productos Tubulares, en Vizcaya.

Además, el grupo se enfrenta ahora a la incertidumbre generada por los nuevos aranceles impuestos por Donald Trump a las importaciones del acero y el aluminio. Desde Sabadell, ya advirtieron de que para Tubos Reunidos el impacto de estas medidas podría ser “relevante y potencialmente negativo”, ya que “Estados Unidos representa más del 40% de las ventas y buena parte de estas son importaciones”. “En todo caso, la presencia local a través de RDT podría minorar este impacto, que es por tanto difícil de medir", señalaron los analistas.