La Administración estadounidense ultima un nuevo paso en su disputa comercial y diplomática con China. El Gobierno de Donald Trump dará luz verde a una nueva lista negra de empresas tecnológicas del gigante asiático con las que no se podrán realizar contrataciones públicas.
La nueva regulación, que podría aprobarse en los próximos días, según adelanta la agencia Reuters, impedirá que la Administración estadounidense compre bienes o servicios de cualquier empresa que emplee como proveedor a, al menos, cinco compañías chinas, entre las que estarían, Huawei, Hikvision y Dahua. Estas dos últimas están especializadas en la fabricación de cámaras y equipos de vigilancia.
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Los dos ases en la manga que guarda Donald Trump para las elecciones de EEUUNo se trata de un movimiento nuevo, porque este veto se basa en una regulación de 2019, que ya requería que las empresas que mantienen contratos de bienes y servicios con Estados Unidos certificaran que no usaban tecnología de determinados proveedores chinos, como Huawei o ZTE.
De esta forma, cualquier contrato con la administración estadounidense con cualquier de estas compañías no será posible, cuando se ponga en marcha la regulación, salvo que cuente con una exención específica, según indica la citada agencia.
Esta nueva medida de presión comercial se añade a las recientes tensiones entre las dos potencias económicas, a las que se ha sumado la pandemia de coronavirus y los recientes cambios de legislación en Hong Kong.