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Acaba la cuenta atrás para Tesla. Los de Elon Musk deben pagar 920 millones de dólares en bonos convertibles, su mayor pago de deuda en 16 años de historia.
Para poder realizar una parte del pago en acciones, los títulos de la fabricante de vehículos eléctricos tendrían que haber tocado los 359,87 dólares. ¿En qué niveles se han quedado finalmente? En los 306,91 dólares.
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Elon Musk, a la lona: "Un combate con la SEC es lo último que Tesla necesita"Los accionistas deben decidir ahora si prefieren recibir el pago en acciones de la compañía o en efectivo.
Todo apunta a que optarán por esta última opción. Y es que, en los niveles actuales, de elegir la primera opción recibirían unos 850 dólares (según 'Bloomberg', que a su vez toma como referencia los 20 últimos días de Tesla en bolsa), respecto a los 1.000 dólares que ingresarían si optan por el efectivo.
La emisión de estos bonos convertibles tuvo lugar en 2014. Desde 'Bloomberg' recuerdan que, a esos 920 millones de dólares, la fabricante debe sumarle otros 1,15 millones en intereses.
¿Cómo afecta esto al dinero que Tesla guarda en caja?
A 31 de diciembre de 2018, la compañía tenía unos 3.700 millones de dólares en efectivo, más que suficiente para rendir cuentas con sus bonistas.
De hecho, un portavoz de la fabricante aseguró a 'Bloomberg' que "tenemos a mano dinero suficiente para pagar con comodidad".
MUSK, UN LASTRE PARA TESLA EN 2019
¿Cuándo fue la última vez que Tesla cotizó en los 360 dólares que debía alcanzar? El pasado 14 de diciembre. Precisamente, en lo que va de 2019 la compañía acumula unas caídas del 10%. Y todo, en medio de los enfrentamientos de Musk con la SEC (Security Exchange Comission), la CNMV de EEUU.
Este organismo supervisor ordenó al juez la detención de Musk este mismo lunes afirmando que había incumplido la sentencia que le impusieron hace meses. Una resolución que impedía al consejero delegado de Tesla difundir información sobre la misma sin su consentimiento previo. Desde entonces, Musk no ha tardado en reincidir y publicar noticias para sus inversores a través de su perfil de Twitter, aprovechando además para cargar contra la propia SEC.
La última de ellas tuvo lugar este miércoles. Musk se cambió provisionalmente su nombre de usuario a Elon Tusk ('Tusk' significa colmillo inglés, apellido al que acompañó con la fotografía de un elefante) y aseguró que este jueves anunciaría grandes noticias de su compañía.