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Tesla ha omitido en su último reporte anual el objetivo previamente declarado de alcanzar una producción total de 20 millones de coches al año para 2030, lo que se suma a la lista de preocupaciones sobre el futuro de la compañía fundada por Elon Musk.
En el informe, la firma ha asegurado que su objetivo principal pasa por "desplazar a los combustibles fósiles vendiendo tantos productos Tesla como sea posible", aunque no ha incluido las previsiones de producción que si figuraban en los reportes anteriores.
En el primer trimestre del presente año, la firma reportó 433.371 coches producidos y 386.810 entregados, unas cifras que se han situado por muy por debajo de las 422.875 entregas y la producción de 440.808 vehículos del mismo periodo de 2023.
En los últimos resultados trimestrales, la compañía anunció su intención de centrarse en el desarrollo de modelos más asequibles para así impulsar las ventas, una noticia que fue recibida con optimismo por las bolsas. También confirmó que presentará el Robotaxi en agosto.
En el informe publicado este jueves, el fabricante de vehículos eléctricos estadounidense ha subrayado el tiempo de actividad promedio del 99,97% en sus sitios 'supercharger', semana después de despedir a todos los integrantes de esta divisón.
La compañía se encuentra en un proceso de ajuste de plantilla, por el que despedirá a "más del 10%" de su fuerza laboral global, esto es, 14.000 trabajadores.
