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Telefónica ha suscrito un acuerdo para la venta de una cartera de 11 Data Centers localizados en 7 jurisdicciones (España, Brasil, EEUU, México, Perú, Chile y Argentina) a una sociedad controlada por Asterion Industrial Partners por un importe total de 550 millones de euros.
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El acuerdo de venta se acompaña de la firma de un contrato de prestación de servicios de 'housing' al Grupo Telefónica, el cual garantiza que Telefónica seguirá prestando en dichos Data Centers los servicios a sus clientes con la misma calidad y en las mismas condiciones.
El cierre de la venta tendrá lugar en un plazo aproximado de dos meses, salvo la de cuatro Data Centers, cuya efectiva transmisión está condicionada a determinadas autorizaciones y trámites administrativos.
Telefónica ha declarado que esta operación se enmarca dentro de la política de gestión de cartera de activos del grupo, "basada en una estrategia de creación de valor, optimización del retorno sobre el capital y posicionamiento estratégico". Asimismo, complementa el objetivo de reducción de deuda y fortalecimiento de balance por la vía orgánica.
CUMPLIENDO CON EL GUIÓN
Como era previsible, Telefónica ha anunciado esta operación en vísperas de publicar sus resultados del primer trimestre (este viernes, 10 de mayo). La operadora hizo lo mismo justo antes de publicar sus cuentas de 2018. El 21 de febrero anunció estas cifras, justo un día después de comunicar la venta de sus filiales en centroamérica.
Asimismo, en 2017, Telefónica informó de la venta de Telxius a KKR el 21 de octubre y el 27 de octubre anunció sus cuentas del tercer trimestre.
La operadora es muy consciente de que, para el mercado, algo fundamental es que vaya reduciendo la deuda. Hasta el momento viene haciéndolo durante siete trimestres consecutivos, aunque para algunos el ritmo de reducción sigue siendo lento y muchos siguen reclamando la venta de activos mayores, como O2.