- El Ejecutivo del PP se negó al calcular su coste recaudatorio
- Las asociaciones fotovoltaicas defienden que no tendría coste para el Gobierno
Unos 170 millones de euros. Ese es el coste que puede tener para las arcas del Estado suprimir el denominado 'impuesto al sol', una de las promesas realizadas este jueves por el líder socialista, Pedro Sánchez.
Actualmente, los autoconsumidores con más de 10 kw contratados pagan un peaje de respaldo por mantenerse conectados a la red eléctrica. A principios de mayo, PSOE, Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea, ERC, PDeCAT, PNV, Compromís, EH-Bildu y Nueva Canarias registraron una nueva proposición de ley para fomentar el autoconsumo energético y derogar este peaje.
El Gobierno del Partido Popular se ha opuesto en repetidas ocasiones a esta pretensión, al calcular que tendría un coste importante para el Estado. Según el Ejecutivo, el autoconsumo representa el 2% del volumen total, lo que supone 220 millones de euros que no se negociarían en el mercado regulado.
En este escenario, la recaudación fiscal bajaría en 74 millones: 15 millones menos por el impuesto de generación, 11 millones menos por el impuesto especial de electricidad y 48 millones menos por el IVA. El Gobierno también estimó que retirar el 2% de la generación del 'pool' energético equivaldría a reducir el precio de la electricidad y recaudar otros 74 millones de euros menos.
Del mismo modo, el sistema de peajes se recortaría en 50 millones, lo que a su vez supondría una merma en la recaudación de otros 14 millones y un gasto adicional de otros 10 millones de euros de los Presupuestos para compensar el déficit en el sistema eléctrico.
Por su parte, desde la Unión Española Fotovoltaica (Unef) defienden que suprimir este peaje impulsaría las instalaciones solares en España y contrarrestaría ese efecto negativo para las arcas del Estado.
La Unión Española Foltovoltaica (UNEF) argumenta que derogar el 'impusto al sol' no supondría un coste presupuestario, ya que al favorecer las inversiones y eliminar las barreras de entrada se generaría un IVA que sería superior al que se dejaría de ingresar por el recibo de la luz.