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El consorcio formado por las empresas europeas Snam, Enagás y Fluxys ha cerrado la adquisición del 66% de Desfa, el operador de la red de transporte de alta presión de gas natural de Grecia. La privatización de esa parte del capital -el restante quedará en manos del Estado griego-, se ha cerrado por 535 millones de euros.
Este consorcio ganó el pasado mes de abril la licitación realizada por la Agencia Griega de Privatización (Taiped) para hacerse con una participación mayoritaria en el operador griego.
La operación se ha cerrado tras el cumplimiento de las condiciones suspensivas en el acuerdo de compraventa, ha informado Enagás al regulador este jueves. El consorcio, que lidera Snam con un 60% de la participación, seguido de Enagás y Fluxys (20%, respectivamente), ha realizado la compra a través de la sociedad griega Senfluga Energy Infrastructure a los vendedores, Hellenic Republic Asset Development Fund y Hellenic Petroleum.
La operación, añade la española, "ha sido financiada con deuda sin recurso a los accionistas y supone una inversión de 40 millones de euros para Enagás".
APORTE DEL CONSORCIO A DESFA
Desfa cuenta con una red de 1.500 kilómetros de gasoductos y una planta de regasificación, Revithoussa. Enagás y sus socios contribuirán al desarrollo del sistema gasista griego en los próximos años y al posicionamiento de Grecia como 'hub' de gas natural, "lo que supondrá un impulso tanto para el mercado doméstico como para otros proyectos de tránsito de gas natural", explica Enagás.
Además, según las empresas, aportarán a Desfa sus capacidades técnicas y operacionales y se desarrollarán nuevos usos del gas natural -como el uso del metano para el transporte o el impulso del biometano-, para contribuir al proceso de reducción de emisiones en el país.
Grecia es un enclave fundamental para la diversificación del suministro energético en Europa. Gracias a su posición estratégica en el Mediterráneo es un actor clave en la apertura de nuevas rutas de gas natural en el continente.
En 2017, Desfa registró un crecimiento significativo con respecto al año anterior, con un ebitda de alrededor de 177 millones de euros -que incluye unos ingresos no recurrentes- y una posición financiera neta positiva de alrededor de 5 millones de euros -con cerca de 228 millones de caja disponible-.