Ryanair comienza a adoptar su nueva política de equipaje de mano el próximo 1 de noviembre. Esto implica que a partir de esta fecha obligará a los clientes a pagar por las maletas de hasta 10 kg que introduzcan en la cabina, algo que hasta ahora era gratuito.
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Así, los clientes no prioritarios solo podrán llevar en la cabina una bolsa de viaje gratis, mientras que los prioritarios podrán introducir dos bolsas sin coste adicional. Los clientes no prioritarios que deseen añadir una maleta de 10 kg a su reserva podrán hacerlo desde 6 euros y traer dos bolsas o añadir un equipaje facturado a su reserva desde 8 euros, que se debe facturar en el mostrador de entrega de equipaje.
Si el bulto de mano de los clientes no prioritarios no cabe en el nuevo medidor, deberán pagar una tarifa de 25 euros
Los que agreguen el equipaje después de reservar y hasta 40 minutos antes de la hora de salida programada del vuelo el importe ascenderá a 10 euros.
En cuanto a las medidas, si el bulto de mano pequeño que los clientes no prioritarios pueden subir a cabina no cabe en el nuevo medidor, significará que es más de un 25% más grande que las dimensiones permitidas. Estos clientes deberán pagar una tarifa de 25 euros en la puerta de embarque y su bolsa será etiquetada y bajada a bodega.
Además, la aerolínea destaca que el servicio prioritario tiene un límite de 95 clientes por vuelo. Los artículos médicos pueden seguir subiendo a bordo de forma gratuita siempre con la autorización previa de nuestro equipo de asistencia especial.
Con esta medida se pretenden reducir los retrasos en los vuelos y abaratar el coste del equipaje facturado. También defiende que ninguna aerolínea permite que sus pasajeros suban todas las maletas a la cabina. Anteriormente, todos los clientes no prioritarios podían llevar consigo a bordo un bolso de mano y una maleta sin cargo adicional, según explicó Ryanair a finales de agosto.