- 0,016£
- 0,28%
Rolls Royce ha firmado la venta del fabricante vasco de motores ITP Aero a un consorcio compuesto por Bain Capital, que tendrá el 70% de la participación, JB Capital y Sapa, por 1.700 millones de euros. Aún así, todavía se pueden sumar más socios industriales a la transacción hasta 2022.
La operación, que se ha estado negociando durante el verano, tenía cierta dificultad al considerar a la sociedad vasca como empresa estratégica, por lo que la toma de más de un 10% de las acciones suponía la previa autorización del Consejo de Ministros, además de cumplir ciertos requisitos como el de mantener la españolidad de la compañía. Es por ello que el fondo estadounidense ha incluido a JB Capital, la firma de inversión de Javier Botín, y Sapa.
El conglomerado británico mantuvo conversaciones también con Cinven dentro de su programa de desinversiones por el que quería deshacerse de ITP Aero, aunque el pasado 4 de agosto se conocía que Rolls Royce se decantaba por la oferta de Bain Capital.
La firma del acuerdo, que se ha realizado en Londres, recoge el compromiso de los nuevos dueños de mantener la totalidad de los empleados, la sede, su independencia y el impulso industrial de la compañía. "La asociación de ITP Aero con Bain Capital y el consorcio le permitirán impulsar aún más su condición de fabricante de primer nivel, a la vanguardia en nuevas tecnologías, gracias a una plantilla altamente cualificada", dice el fabricante aeronáutico en un comunicado.
"Esta operación constituye un momento muy importante para todos los que formamos ITP Aero. Podremos reforzar aún más nuestra posición en el sector aeronáutico, seguir ofreciendo altos niveles de innovación y servicio a nuestros clientes y expandir nuestro negocio para captar oportunidades de crecimiento relevantes", ha dicho Carlos Alzola, consejero director general de la compañía que ha sido ratificado por Bain.
La compra todavía sigue pendiente de cerrar algunos flecos. El fondo de inversión estadounidense se da de plazo hasta junio de 2022 para incorporar nuevos socios industriales que sumen hasta el 30% del capital social del consorcio creado.