Repsol ha sido uno de los valores que peor comportamiento ha registrado este miércoles en el Ibex 35 (-0,61%, 13,78 euros por acción), lastrado por las fuertes caídas del precio del crudo.
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El barril Brent, de referencia en Europa, cede más un 4% y pierde los 80 dólares, después de que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados, el grupo conocido como OPEP+, haya aplazado su reunión prevista para el 25 y 26 de noviembre al próximo día 30 de noviembre.
Este hecho también ha provocado correcciones en el sector energético del Viejo Continente, donde compañías como Eni (-1,41%), Shell (-2,01%), BP (-2,23%) o TotalEnergies (-1,75%) han acusado en bolsa el movimiento bajista del 'oro negro'.
El Brent ha perdido el soporte clave de los 82 dólares, precios en donde se encontraba la media de 200 sesiones. "Tras una pequeña reacción a estas últimas subidas, todo parece indicarnos que podríamos acabar viendo una extensión de las caídas hasta el nivel de los 72 dólares. Creemos que aún le queda recorrido a la baja", explica César Nuez, analista técnico de Bolsamanía.
Este empeoramiento del aspecto técnico del petróleo ha arrastrado a Repsol. "Hace tan solo unas jornadas la petrolera perdió la media de 200 sesiones tras dibujar máximos decrecientes, y lo que nos hace extremar la prudencia es que se ha dejado un hueco bajista, esta misma semana, que se suma al que ya se dejara el pasado 23 de octubre", añade el experto.
En este sentido, considera que ahora, el soporte clave se encuentra en los 13,34 dólares, mínimos del pasado miércoles. "Si los pierde, lo más normal es que terminemos viendo una extensión de las caídas hasta el nivel de los 12,50 euros, precios en donde presenta una importante banda de soporte", enfatiza.
Durante la presentación de sus resultados de los nueve primeros meses del año, la petrolera española informó de un resultado neto de 2.785 millones de euros, un 14% menos que en el mismo periodo de 2022 en un contexto de precios del crudo y del gas "significativamente inferiores".
Además, la empresa subrayó que los precios de la materias primas habían descendido "de forma notable" desde las anómalas cotas en las que se situaron el año pasado.
En el último trimestre del ejercicio los recortes de producción de algunos países impulsaron de nuevo al alza los precios y, junto con la incertidumbre sobre el crecimiento económico mundial, tensionaron un mercado que, según Repsol, previsiblemente "seguirá caracterizado en los próximos meses por la volatilidad derivada del convulso escenario geopolítico".
Antes del retraso, los analistas habían pronosticado que la OPEP+ probablemente ampliaría o incluso profundizaría los recortes de la oferta de petróleo hasta el año que viene. Con todo, la reunión tendrá lugar en un entorno de mercado desafiante, marcado por la caída de los precios del petróleo, una recuperación de la demanda china más lenta de lo esperado y el conflicto en Oriente Medio.
