El consumo de carburantes ya está retomando el vuelo y, según reconoce Repsol, ya ha dejado atrás los desplomes de los meses de marzo y abril por las restricciones a la movilidad consecuencia de la epidemia de coronavirus. Y también recupera fuelle el precio del crudo, hasta afianzarse el barril de Brent, el de referencia en Europa, en los 40 dólares.
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El consejero delegado de la energética, Josu Jon Imaz, marcó ayer esta evolución al alza en las semanas más recientes. Y la propia compañía señaló una estimación de 43 dólares el barril para el actual ejercicio 2020, según indica en la documentación de resultados presentada este jueves.
En este sentido, Imaz recordó, durante la presentación a analistas, que han quedado atrás los 20 dólares por barril de las semanas más complicadas de la crisis sanitaria.
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De cara a los próximos años, este optimismo se amplía: el Brent alcanzará los 49 dólares en 2021 y se afianzará en los 67 dólares el barril a partir de 2022, según las hipótesis remitidas a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). De media, para el periodo 2026-2050, contempla los 60 dólares.
INSUFICIENTE REACCIÓN DE LA OFERTA
“A las dinámicas de mercado de medio y largo plazo, la nueva orientación estratégica y los compromisos publicados de cero emisiones netas en 2050, que supusieron una revisión de las expectativas de precios del crudo y especialmente del gas, y por tanto, la reducción del valor recuperable de los activos en 2019, se han unido en 2020 el impacto del Covid-19 y la sobreoferta de crudo en el mercado”, explica Repsol a la CNMV.
La compañía añade que la crisis del coronavirus “ha generado una contracción de la demanda de petróleo nunca vista y la reacción de la oferta ha sido insuficiente para ajustarse a la escasa demanda, a pesar de que la OPEP ha realizado el mayor recorte de producción de su historia y otros productores también han asumido fuertes recortes”.
Repsol ve recuperación del crudo y también Barclays. La entidad, a pesar de que aún teme que la demanda vuelva a resentirse, señala que el barril de Brent se ha consolidado en el entorno de los 40-45 dólares; y mantiene la previsión de 53 dólares para el próximo año.
