- 0,058€
- 0,36%
Deutsche Bank se reinventa. La reestructuración del mayor banco alemán pasará, entre otras medidas, por el recorte de 18.000 empleos hasta 2022. Una hoja de ruta que desde entidades como Scope y Bank of America Merrill Lynch catalogan de ser tan necesaria como tardía.
Noticia relacionada
Deutsche Bank anuncia el despido de 18.000 trabajadores en tres añosLos expertos de BofAML reconocen que el nuevo plan de Deutsche es ambicioso pero ven sus ganancias empeorando y tocando fondo antes de remontar el vuelo. Por ello, reiteran su recomendación de ‘infraponderar’ y un precio objetivo de 5 euros respecto a los 6,73 euros en los que cotiza el título, es decir, anticipando una caída del 25,7%.
BofAML señala las dos principales asignaturas pendientes de Deutsche: que los tipos de interés pasen de viento de cara a viento de cola y ser capaz de incrementar sus ingresos al mismo tiempo que lleva a cabo los recortes anunciados. Precisamente ese riesgo de ejecución es el gran problema que señalan los expertos de Scope Ratings.
Esta entidad rebajó el rating de Detusche el 28 de mayo al creer que "el retorno a la rentabilidad sostenible sigue siendo abrupto y lleno de incertidumbres". Con todo, reconoce que "está haciendo ahora lo que no hizo en anteriores ocasiones y sólo el tiempo dirá si esta vez es diferente".
BofAML y Scope no son las únicas en opinar sobre la reestructuración que planea Deutsche. Por ejemplo, Elliot Wave International hace referencia a la idea de crear un banco malo (aunque desde la entidad germana se resisten a utilizar estos términos) y aseveran que "Europa ya está llena de esqueletos de estas entidades fallidas y Deutsche está ya al borde del desastre".
Finalmente, en Wall Street opinan que las reformas propuestas por el gigante alemán son "muy profundas, radicales y, al mismo tiempo, desafiantes". Desde Goldman se vieron "sorprendidos por la cantidad de despidos anunciados", idea que comparten en RBC al catalogar de "reformas más radicales de lo anticipado" las acciones del banco. En Citi, califican los objetivos de Deutsche de "optimistas" mientras que desde Barclays ponen el foco en "la ejecución en la reducción de costes que lleve a cabo la dirección del banco".