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Procter & Gamble, uno de los mayores vendedores de productos para el cuidado personal, ha superado los pronósticos del consenso con los resultados de su primer trimestre fiscal, aunque al mismo tiempo ha alertado sobre el impacto de una inflación más elevada en su cuenta de resultados.
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El beneficio por acción (BPA) de la compañía, propietaria de marcas como Gillette o Colgate, fue de 1,61 dólares durante el trimestre, ligeramente por encima de los 1,59 dólares esperados.
Sus ingresos trimestrales aumentaron a un ritmo del 5,3%, hasta 20.340 millones de dólares, por encima de los 19.900 millones pronosticados.
"Logramos resultados sólidos en un entorno operativo y de costes desafiante", ha comentado David Taylor, presidente y consejero delegado (CEO).
En este sentido, el margen bruto para el trimestre disminuyó 370 puntos básicos en comparación con el año anterior. La bajada en el margen bruto fue impulsada por 350 puntos básicos de aumentos en el coste de los productos básicos, 80 puntos básicos de una combinación desfavorable (debido a la combinación de productos y tamaños de paquetes), 50 puntos básicos de mayores costes de transporte y 60 puntos básicos de inversiones en productos y envases.
Estas bajadas fueron parcialmente compensadas por 100 puntos básicos de ahorros de productividad bruta de manufactura y 50 puntos básicos de beneficios de precios.
La compañía espera un impacto de 2.100 millones después de impuestos por mayores costes de los productos básicos y 200 millones adicionales después de impuestos por mayores costes de flete. Este impacto reducirá en 90 centavos el beneficio por acción (BPA) del año fiscal 2022.
