Pescanova, inmersa en un proceso concursal tras el estallido del fraude de sus cuentas, ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que sus ventas durante los seis primeros meses de 2014 se han situado en 434 millones de euros. Sin embargo, su resultado operativo implica pérdidas por 8,18 millones.
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En términos netos, la cifra es de 1,79 millones, pero Pescanova destaca los 27 millones de euros de resultado operativo, antes de amortizaciones, deterioros y otros resultados no estrictamente operativos, un incremento relevante respecto al ejercicio anterior.
En cuanto a esos 434 millones de euros de cifra de negocio, Pescanova explica que no son comparables con 2013, pero definen su comportamiento “como muy positiva la evolución del negocio, ya que se ha conseguido que la situación concursal no afectase al nivel de suministro y servicio tanto a clientes directos como a los consumidores finales”.
Para Pescanova, los principales riesgos e incertidumbres que afronta están relacionados con la implementación de la propuesta de convenio y el cumplimiento del plan de pagos incluido en esta proposición. Esa propuesta incluye dos opciones, la básica o la alternativa, pero en ambos casos supone quita para los acreedores.
Propuesta básica: se articula una quita y una espera en función del importe del crédito, según el siguiente esquema:
a. Acreedores con créditos de más de 100.000 euros: quita del 97,5% y espera de 8,5 años.
b. Acreedores con créditos de menos de 100.000 euros: quita del 0,0% y espera de 1 año.
2. Propuesta alternativa: esta propuesta contiene una quita y una espera que se desdobla en un tramo senior y un tramo junior.