- Nvidia ha presentado el chip en CES, la feria de electrónica de futuro
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Nvidia, empresa tecnológica especializada en chips, se ha asociado con Uber, Volkswagen y Baidu, compañía china, para pone en marcha automóviles sin conductor. El objetivo del fabricante de chips es expandir su presencia en el espacio de coches autónomos.
Nvidia ha aprovechado el CES, feria de electrónica de consumo, que se celebra en Las Vengas, para presentar el chip Xavier y desvelar todos sus detalles. Este chip será el corazón de la plataforma Drive IX, que la empresa está desarrollando para controlar coches autónomos.
La incorporación de este procesador en la plataforma ayudará a que los vehículos que apuesten por ella puedan implementar funciones, como el control por gestos, reconocimiento facial, o asistentes virtuales capaces de entender nuestro lenguaje natural cuando interactuamos con ellos.
En el sector de la automoción, y tal y como publica Reuters, la plataforma Nvidia Drive trabaja con un total de 320 compañías; desde desarrolladores de software hasta fabricante de coches pasando por firmas de sensores y mapas.
El último anuncio protagonizado por la compañía viene a reforzar una de estas áreas. Nvidia se ha asociado con Uber para el desarrollo del programa de conducción autónoma y con Volkswagen para la integración de tecnología artificial en los modelos que la compañía alemana fabricará en modelos futuros.
Así lo ha anunciado Jen-Hsun Huang, fundador de Nvidia durante su comparecencia. El ejecutivo también ha revelado que los primeros procesadores Xavier llegarán durante el primer trimestre de 2018 y que trabajará con la firma Aurora para construir una plataforma de hardware que utilice estos procesadores.
Durante la presentación de los resultados financieros correspondientes al tercer trimestre, Nvidia celebró la aceleración de la adopción de inteligencia artificial en muchas industrias, algo que favoreció a sus áreas de negocio. “Estamos muy bien posicionados para continuar creciendo”, ha señalado Huang.
Las acciones de la compañía suben más de un 2% en Wall Street, y se sitúan por encima de los 220 dólares.