La segunda reunión de mediación celebrada entre Nissan y los comités de empresa de las plantas catalanas de la firma automovilística ha finalizado sin acuerdo, cuando se cumplen 17 días del inicio de la huelga indefinida convocada por los sindicatos para reclamar que se clarifique el futuro de la compañía. La empresa ha reconocido que no puede asegurar el empleo ni los volúmenes de producción actuales en Barcelona.
El encuentro se ha realizado de forma telemática y han participado representantes de la Conselleria de Trabajo de la Generalitat de Cataluña, de los comités de empresa de los cinco centros y de la propia compañía, han informado los representantes de los trabajadores en un comunicado, en el que han criticado que no haya asistido el consejero director general de Nissan Motor Ibérica, Genís Alonso, algo que han calificado como una "gran falta de respeto" hacia la plantilla.
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Nissan cerrará la fábrica de Barcelona y planea llevarse la producción a FranciaSegún fuentes sindicales, la dirección de la compañía ha comunicado de manera oficial que la multinacional nipona anunciará su plan estratégico a medio plazo el 28 de mayo. La marca asiática estudia el cierre de la planta de la Zona Franca de Barcelona y trasladar su producción a factorías de Renault, según adelantó hace unos días el diario japonés Nikkei.
Los comités han explicado que la situación ha cambiado después de la última reunión, que tuvo lugar antes de la huelga, porque las noticias publicadas y los 17 días de huelga han hecho que los objetivos "vayan más allá de los 12 meses de mantenimiento de empleo". "Si en aquella ocasión la incertidumbre era el motivo del paro, ahora la certeza de que nuestro futuro está en el aire nos hace subir las exigencias", han señalado, y han criticado que la dirección ha asistido a la reunión sin nada nuevo ni poder asegurar el empleo, en sus palabras.
Nissan ha dicho a los sindicatos que solo puede garantizar durante un año la fabricación de los modelos que actualmente se ensamblan en la planta barcelonesa, pero no más allá, "dada la incógnita sobre cuál será demanda", recoge Cinco Días. Tras quedarse sin el Mercedes-Benz Clase X (a partir de mayo), al centro de Zona Franca, que opera por debajo del 30% de su capacidad, le quedan el Nissan Navara y el Renault Alaskan, más la variante eléctrica de la NV200.
El posible cierre de la planta catalana, que da empleo a 3.000 personas de manera directa y a 20.000 de forma indirecta, se enmarca dentro del plan de reestructuración que está elaborando el fabricante nipón. Planea recortar 2.800 millones de dólares (2.600 millones de euros) al año en costes fijos ante la caída de las ventas provocada por el Covid-19 y tras años de bajadas en el beneficio y baja rentabilidad.
Los sindicatos han asegurado que, durante la reunión, los representantes de la compañía han defendido que habían incluido de nuevo en el ERTE a los trabajadores de la planta de la Zona Franca por su seguridad ante el riesgo de contagio de coronavirus, lo que han tachado de "cinismo superlativo". De hecho, los representantes de los trabajadores han presentado una demanda contra Nissan al considerar que esta nueva inclusión en el expediente "no tiene cobertura legal" y que vulnera el derecho a huelga.
Los comités de empresa han señalado que seguirán sentándose en las reuniones que haga falta y seguirán defendiendo el mantenimiento del empleo de todas las plantas de Nissan en Cataluña.
LA GENERALITAT TRABAJA PARA MANTENER EL EMPLEO
El vicepresidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès, ha afirmado este miércoles que están "desplegando" toda su capacidad para mantener toda la producción de Nissan que sea posible en Cataluña. Aragonès ha defendido que no hay que "tirar la toalla" sobre el futuro de Nissan porque la decisión aún no está tomada, y ha apuntado que hay dificultades, ya que los trabajadores están en huelga, porque no ha habido acuerdo.
"Hay decisiones que se toman en el ámbito global en el que intervienen muchos factores, ofrecemos el apoyo en el ámbito de mediación, también en la protección de los derechos de los trabajadores y del fomento de la industria", ha añadido, y ha insistido en que desde la Generalitat catalana defienden que el derecho a huelga es fundamental.
Ha señalado que Cataluña necesita que las plantas de Nissan continúen y que por ello el Govern se ha puesto a disposición del comité de empresa y de la compañía para ayudar en esta situación de dificultad. "Como Govern trabajaremos para apoyar las iniciativas que permitan continuar con la producción y la actividad de esta compañía", ha añadido.