- Los grandes beneficiados de este escenario son las seis familias multimillonarias que hay detrás de las cerveceras españolas
Con la llegada del buen tiempo comienza la temporada de terrazas. Una de las épocas preferidas por los españoles para hacer vida social y la mejor manera de poder disfrutar de una buena cerveza bien fría. Una rutina cada vez más habitual. Porque el tradicional ‘zumo de cebada’ ha conseguido recortarle terreno al vino en España y, en estos momentos, su consumo se encuentra en cifras récord.
Solo en la hostelería, donde se realiza un 64% del consumo total en España, se vendieron 1.900 millones de litros de cerveza en 2016, un 3,2% más que en el año anterior. En total, según los datos de Cerveceros de España, se estima que ‘por cabeza’ se han consumido 46,4 litros en el último año.
Una actividad muy beneficiosa para las arcas del Estado, como apunta esta asociación, debido a que este sector generó más de 3.600 millones de euros en impuestos y más de 344.000 puestos de trabajo en 2016. Un dato que se debe en gran parte a que el 90% de la cerveza consumida en España se elabora en nuestro país.
No obstante, los que más han aplaudido esta evolución han sido los fabricantes. Las compañías cerveceras comercializaron 3.400 millones de litros de cerveza en 2016. Un dato que supone un incremento del 3,4% de sus ventas respecto al año anterior y se alza como el mayor incremento de la década en el sector. Ante un escenario tan favorable, a los magnates de la cerveza lo celebran brindando ‘con y por’ su producto.
LAS SEIS GRANDES FORTUNAS DE LA CERVEZA
El éxito del mercado de la cerveza en España repercute, principalmente, en el bolsillo de seis familias. Los magnates de unos negocios que, partiendo de pequeñas cerveceras, han logrado levantar multinacionales y amasar una gran fortuna, como es el caso de Mahou.
Detrás de la cervecera madrileña están dos 'clanes': los Mahou Herráiz y los Gervás Sanz, dos ramas que descienden del fundador Casimiro Mahou. Ambas familias comparten el poder de una compañía que factura más de 1.100 millones de euros y que tiene bajo su poder más de 43 marcas de cerveza.
La compañía que, actualmente, preside José Antonio Mahou Herraiz ha fomentado su expansión con la adquisición de otras cerveceras como San Miguel en 2000, tras ello el grupo pasó a llamarse Mahou San Miguel. Después de esta incorporación ha incorporado a Alhambra, Cervezas Anaga, Founders (EEUU) y Airán (India). Además ha incorporado las marcas artesanales Nómada y La Salve. También han dado el paso al negocio del agua con la incorporación del grupo Solán de Cabras.
Pero la cebada ha sido su mina de oro. Las dos estirpes de Mahou poseen un patrimonio valorado en 2.750 millones de euros, según la revista Forbes, y son la octava fortuna de España. Una riqueza donde destacan múltiples bienes inmobiliarios en Madrid e incluye la posesión de cinco sicav, según la CNMV, dos los Mahou Herráiz y tres los Gervás Sanz.
Otra familia está bajo el control de Estrella Galicia, los Rivera. En estos momentos, Ignacio Rivera, cuarta generación familiar, está al frente de la Corporación Hijos de Rivera. El grupo ha logrado en 2016 superar la barrera de los 400 millones de euros de facturación, se han situado en los 408 millones.
Hijos de Rivera ha logrado expandir su imperio más allá de las fronteras gallegas y españolas. El grupo posee filiales en Sao Paulo (Brasil), Virginia (EE.UU), Shanghai (China), Manila (Filipinas) y Tokyo (Japon). También tiene una importante participación en el sector del agua en compañías como Cabreiroá, Fontarel y Agua de Cuevas. El grupo también está formado por la sidra Maeloc y los vinos Ponte da Boga. La última adquisición del grupo ha sido el 32% de la cervecera irlandesa Carlow Brewing Company, los productores de la cerveza O'Hara, la gran 'rival' de la Guinness en el país del trébol.
La fortuna de los Rivera supera los 250 millones de euros, según el ranking de los '200 más ricos de España' de El Mundo. Entre sus inversiones que más destacan son las pequeñas participaciones que tienen en el Celta de Vigo, Deportivo de la Coruña, Compostela y Ourense.
Decir Damm es hablar de la familia Carceller. La cervecera tiene una facturación de más de 950 millones de euros, el grupo cuenta en sus filas con marcas como Estrella Damm, Voll-Damm, Xibeca, Keler, Victoria, Estrella del Sur, Estrella de Levante o Turia.
Al frente de todo está Demetrio Carceller Coll, tras heredar el imperio familiar de los Canceller, una de las mayores fortunas del país. Su patrimonio valorado en 1.800 millones de euros. Una cuantía que ha levantado con la cerveza y con la gasolina, ya que la familia es propietario de la petrolera Disa. Una empresa encargada del suministro de gas y petróleo, sobre todo, en Canarias. También es dueña de Cacaolat, Rodilla y la sicav Renta Insular Canaria. Además, Demetrio es vicepresidente del consejo Ebro Foods y Sacyr.
Aunque el éxito familiar en los negocio se vio empañado por verse vinculados en uno de los mayores fraudes fiscales de la historia de España. Demetrio Carceller Coll y su padre evitaron la cárcel tras el pago de 92,37 millones de euros, en 2016. También su nombre apareció en 'los papeles de Panamá' por poseer varias sociedades 'offshore' para financiar sus negocios en el Estado español.
Otra de las familias de la cerveza son los Roehrich con Ambar. Jorge, Eduardo y Daniel heredaron el negocio de su padre Daniel. Los tres hermanos dirigen el holding Agora, compuesto por las compañías cerveceras La Zaragozana y Cervezas Moritz, las empresas de distribución mayorista Bebinter, Distribuciones Eduardo Pozo y Noeda Distribuciones (D972), la envasadora de aguas y refrescos Concesiones y Bebidas Carbónicas (Cobecsa). No hay datos exactos de la fortuna de los Roehrich, pero según consta en la CNMV, la familia posee una sicav llamada Petronila 2000 con más de 3 millones de euros.
La cervecera sevillana Cruzcampo pasó a manos de Heineken en el año 2000. Esto supuso el aterrizaje de la familia más rica de Holanda en España, los Carvalho-Heineken. Una dinastía cervecera de más de 150 de historia y que, en estos momentos, tiene a Charlene Carvalho-Heineken al frente. Según Forbes, su fortuna ascendería a los 13.500 millones de dólares.