- El impacto de la reforma fiscal ha sido de 990 millones de dólares
- Los beneficios del acumulado anual son de 6.154 millones de dólares
- 2,940$
- 2,44%
Morgan Stanley ha sido el último de los grandes bancos que ha presentados sus cuentas de 2017, que también han estado lastradas por la reforma fiscal de Donald Trump. Los beneficios de la entidad han caído un 60% en el cuarto trimestre del año hasta los 686 millones de dólares. Asimismo, en el acumulado anual, la caída ha sido del 17% hasta los 6.154 millones de dólares.
Según ha informado Morgan Stanley, el impacto de la reforma fiscal ha sido de 990 millones de dólares. Las acciones suben un 1,5% en las operaciones premarket de Wall Street. La entidad americana ha explicado que sin el efecto de la reforma fiscal los beneficios en ese periodo de tiempo hubiesen sido de 1.700 millones de dólares, por encima de los 1.500 millones del mismo periodo del año anterior, una subida del 13%.
Morgan Stanley había previsto hace un parte de semanas un cargo de aproximadamente 1.250 millones de dólares, principalmente por la nueva medición de créditos fiscales conocidos como activos por impuestos diferidos.
Por otro lado, los números para el banco de Wall Street fueron en su mayoría sólidos, con ingresos récord trimestrales de administración de patrimonio de 4.400 millones de dólares, lo que representa un aumento de 4.000 millones de dólares de hace un año, y un aumento del 8% en los ingresos de la banca de inversión hasta los 1.400 millones de dólares.
Morgan Stanley tuvo un momento difícil en su negocio comercial, al ver que los ingresos por acciones cayeron un 5% en comparación a hace un año antes hasta los 1.900 millones de dólares, mientras que los ingresos del comercio de renta fija-históricamente un área comercial problemática se estrelló casi 50 centavos.
James Gorman, presidente y director ejecutivo, señaló que durante el año el banco alcanzó los objetivos financieros que había establecido a principios de 2016. "Entramos en 2018 con un fuerte impulso ayudado por el aumento de las tasas de interés, la reforma fiscal y un marco regulatorio en evolución", dijo.
Las cifras del jueves cierran una temporada de ganancias para los bancos más grandes de EEUU que ha sido más alentadora para los inversores, a pesar de algunos grandes éxitos relacionados con la radical reorganización del régimen tributario estadounidense y varios gastos acelerados y bonos únicos para el personal.
