En el segundo trimestre, Lilly ha registrado unos ingresos de 6.360 millones de dólares (unos 5.435 millones de euros), lo que supone que en este periodo ingresó un 9% más, según ha presentado este martes la compañía farmacéutica. En el mismo periodo del año pasado, la compañía registró unos ingresos de 5.820 millones de dólares (unos 4.970 millones de euros).
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Estos datos se sitúan por encima de las expectativas (6.050 millones de dólares), lo que ha hecho que las acciones de Lilly lleguen a subir un 6,6% en la preapertura del mercado, lo que sitúa la cotización de la compañía cerca de su nivel más alto desde enero de 2001.
Las acciones de Lilly se sitúan cerca de su nivel más alto desde enero de 2001
Además, según los datos presentados, el beneficio por acción de la compañía en el segundo trimestre de 2018 aumentó un 35%, hasta 1,5 dólares, frente a los 1,3 dólares que esperaba el mercado.
"El aumento de nuestros ingresos mundiales se vio impulsado por el crecimiento en volumen de nuestros nuevos medicamentos, mientras que también mantuvimos un gran interés en contener los costes y mejorar la productividad", ha dicho el presidente ejecutivo de Lilly, David Ricks.
