El próximo 1 de agosto entrarán en vigor las nuevas normas de la autoridad europea de los mercados que restringen la comercialización de los productos complejos CFD (contratos por diferencias), aunque la CNMV verá con buenos ojos que se empiecen a utilizar el 27 de junio.
Esa fecha es precisamente el día en que entra en vigor una Circular sobre el mismo tema que el supervisor nacional aprobó hace tres meses. Se trata de una norma con advertencias relativas a instrumentos financieros, que implica que las entidades financieras, cuando comercialicen productos especialmente complejos, deben obligar a sus clientes a reconocer por escrito que están comprado productos “difíciles de entender”. Esta norma entra en vigor el 27 de junio.
Más tarde, el pasado 1 de junio, la Autoridad Europea de Valores y Mercados (ESMA) dio a conocer sus propias medidas relativas a la comercialización de CFD y opciones binarias entre minoristas. En cuanto a los CFD, la autoridad europea establece unas restricciones en relación con su venta o distribución que se aplicarán desde el 1 de agosto. En cuanto a las opciones binarias, prohíbe su comercialización, distribución o venta prohíbe desde el próximo 2 de julio.
Al solaparse las normas europeas (que son efectivas en todo el territorio europeo aunque no existan trasposiciones a las legislaciones nacionales) con las de la CNMV, el supervisor español ha aclarado que considera “aceptable” que desde el 27 de junio se utilicen las normas de la ESMA sobre CFD en lugar de las suyas, aunque realmente la norma europea sea de aplicación desde más tarde, desde el 1 de agosto.
Si no se quieren aplicar las normas de ESMA desde el 27 de junio, se podrán utilizar las de la CNMV entre esa fecha y el 31 de julio, día anterior a la entrada en vigor de las normas europeas en relación con los CFD.
LA FIRMA SERÁ OBLIGATORIA TAMBIÉN A PARTIR DE AGOSTO
Sin embargo, la exigencia de la CNMV de que los clientes firmen un manuscrito declarando que saben lo que están comprando cuando adquieran un producto complejo se mantendrá más allá del 1 de agosto.
Esta firma deberá acompañar el texto de advertencia que se incluye en las medidas de la ESMA, como ha recordado el organismo presidido por Sebastián Albella en un comunicado enviado este viernes.
“La CNMV ha apoyado y comparte las medidas de ESMA y considera que el poder de intervención de productos es una herramienta adecuada para garantizar que los inversores minoristas de la Unión Europea cuenten con un nivel de protección común y evitar prácticas de arbitraje regulatorio”, añade el supervisor nacional.