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Indra (+9,58%) se ha vuelto a adjudicar el recuento de votos electorales, en esta ocasión, en la noche del 10-N. El Ministerio del Interior ha decidido repetir con la cotizada española que será nuevamente responsable del dispositivo. La catalana Scytl era la otra pujante según las primeras informaciones aunque la propia compañía ha desmentido esta posibilidad a 'Bolsamanía': "Como prestamos nuestros servicios en las municipales y europeas, el procedimiento de emergencia de Interior nos hizo imposible optar a esta nueva adjudicación".
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La primera vez que el Gobierno recurrió a Indra fue el pasado 28 de abril. En aquel entonces, el Ministerio se justificó aludiendo al poco margen de tiempo que tuvo para organizar el dispositivo por la vía habitual: la del concurso público.
Scytl, la gran rival de Indra desde su fundación en 2015 por llevar los recuentos electorales, quedó fuera de la carrera por el puesto tras cometer varios errores en el traslado de información desde las mesas electorales al centro en el que se almacenan los votos. En aquel momento, Interior interrogó a la compañía al respecto.
Desde la catalana seguran que no hubo tal error y que "la recogida de datos siempre fue correcta y transparente".
Esta vez, Interior se aferra a una disposición que permite la Ley Electoral cuando, ante la imposibilidad para formar un Ejecutivo, se recurre a esta vía de emergencia de contratación de empresas privadas, más propia cuando tienen lugar catástrofes naturales, por ejemplo.
Indra lleva un mes para el recuerdo. Hace unas semanas se adjudicaba un contrato de Defensa para ser el coordinador nacional industrial del futuro Eurofighter.
