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Indra ha sido seleccionada por la Oficina de Gestión del Tráfico Aéreo del Suroeste de China (SWATMB, por sus siglas en inglés) para implantar algunos de los sistemas clave que contribuirán a convertir la ciudad de Chengdú en el tercer centro aeroportuario del país. Los contratos que le adjudicado a lo largo de este año ascienden a cerca de 27 millones de euros.
Chengdú es uno de los ejes de la actividad económica de China y la puerta de acceso a todo el oeste del país. En los últimos años, el tráfico aéreo que soporta no ha dejado de crecer, hasta situar al aeropuerto internacional de Chengdu-Shuangliu cerca de su límite de capacidad. Por ello, en 2020 está previsto que entre en servicio un segundo aeropuerto internacional, el de Chengdu-Tianfu, con capacidad para recibir hasta 100 millones de pasajeros al año.
La compañía gestionará uno de los espacios aéreos más "complejos y congestionados" del país
Para absorber el enorme aumento de tráfico que esto supondrá, la SWATMB está construyendo un nuevo Centro de Control de Área Terminal que estará dotado con el sistema Indra Air Automation.
El sistema generará los planes de vuelo para todas las aeronaves, centralizará la información y la distribuirá a los usuarios. En sus manos estará el control de uno de los espacios más congestionados de China y del mundo.
Indra también se encargará de implantar en estos aeropuertos el primer sistema de torres de control completamente integrado que entrará en servicio en el país.
La solución facilitará el flujo de información entre las torres de ambos aeropuertos y los diferentes centros de control (ruta y área terminal de maniobra) y la recepción de datos de sensores de vigilancia terrestre (radar de superficie y multilateración, radares de aproximación, etc.) y otras fuentes de información externas, como el servicio meteorológico. Los controladores compartirán gracias a ello una imagen de la situación del tráfico centralizada e integrada.
El sistema de torre contará con fichas de vuelo electrónicas (EFS o Electronic Flight Strips), que sustituirán a las de papel en las que los controladores reciben los datos de los vuelos que tienen bajo su responsabilidad y dispondrá de un sistema de backup y de herramientas de prueba y simulación.
