Ikea planea recortar 7.500 empleos en los próximos dos años. Una decisión que la compañía ha anunciado este miércoles y que afectará principalmente al personal administrativo. Estos despidos esperados representan casi el 5% de la plantilla actual del grupo.
La firma sueca se encuentra en un período de transformación en el que está mejorando sus servicios digitales y de entrega, entre otros, y está probando nuevos formatos de tiendas más accesibles en un entorno minorista y de consumo que cambia rápidamente.
“Necesitamos simplificar la forma en que estamos organizados. En los últimos años hemos invertido en recursos de muchas maneras diferentes. Y, para ser honesto, ahora vemos que en varias partes de nuestra organización tenemos un poco de trabajo duplicado", ha dicho a Reuters el presidente ejecutivo de IKEA, Jesper Brodin.
Al mismo tiempo, el grupo estima que creará 11.500 nuevos empleos en estos dos años a medida que se expande con nuevos formatos de tiendas y en Internet aumenta su oferta de servicios e invierte en capacidades digitales, ha explicado IKEA en un comunicado.