Ikea es a prueba de crisis. El coloso sueco ha anunciado que devolverá al Gobierno de España (y de otros ocho países) las ayudas recibidas para cubrir los ERTE al sufrir menos de lo esperado las consecuencias de la crisis del coronavirus.
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Según ha adelantado el Financial Times, Ikea busca ya la forma de reembolsar los fondos recibidos tanto en España como en Bélgica, Croacia, Portugal, Irlanda, Rumania, Serbia, EEUU y República Checa.
La compañía viene de abrir hace solo una semana todos sus establecimientos físicos en España, después de hacerlo en Madrid, Barcelona y Valladolid, entre otras, al entrar en fase 2. Antes, Ikea ya había abierto sus centros de La Coruña, Asturias, Bilbao, Cádiz, Murcia, Pamplona, Sevilla, Zaragoza, Málaga y Valencia.
"Estamos muy contentos por esta reapertura al completo, ya que después de haber afrontado tiempos difíciles, esto supone acercarnos cada vez más a la normalidad en el negocio y en la atención a nuestros clientes. Desde hoy volvemos a estar 100% operativos", ha llegado a afirmar la directora general de Ikea España, Petra Axdorff.
Solo en España, el gigante sueco ha tenido a 9.000 de sus trabajadores en ERTE, antes de empezar a reincorporarse a finales del mes de mayo. En EEUU, por ejemplo, cuenta con otros 18.000 empleados. Ikea anticipaba un desplome de sus ventas de entre el 70% y el 80% al inicio de la pandemia. Finalmente, no será así gracias a una rápida recuperación de su grueso de clientes.
