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El presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, ha vuelto a mostrarse muy crítico con el impuesto del Gobierno a las eléctricas en la conferencia de presentación de los resultados de 2022 de la compañía. Galán ha dicho que no esperan que este año los tribunales se pronuncien sobre la decisión de las grandes energéticas de recurrir dicho impuesto, y que prevén que esto suceda "probablemente el año que viene".
El presidente de Iberdrola ha afirmado que el impuesto va contra la legislación europea porque se aplica sobre los ingresos en vez de sobre el beneficio extraordinario, y ha remarcado que la compañía no tiene beneficios extraordinarios en España y, de hecho, éstos han caído este año respecto a 2021. El máximo responsable de la compañía ha añadido que el departamento de asuntos legales está tomando todas las acciones necesarias para poder defender los intereses del accionariado.
Ángel Pérez, analista de Renta 4, ha explicado a Bolsamanía que este impuesto del Gobierno puede considerarse recurrible porque grava los ingresos y no los beneficios, y considera que cabe la posibilidad de que al final ganen las compañías. Recordamos que los bancos también han acudido a los tribunales. Si esto ocurre, las empresas recuperarían el dinero que han pagado este año mientras que, de cara a 2024, si llega antes la decisión de la Justicia, es posible que al final no lo tengan que pagar.
RESULTADOS POSITIVOS
Pérez valora favorablemente los resultados publicados hoy por Iberdrola, que ha anunciado un beneficio neto de 4.339 millones en 2022 y un récord de inversiones de 10.730 millones.
"Positivos resultados a nivel operativo que muestran un excelente comportamiento de todos los negocios, favorecido a su vez por los tipos de cambio y ciertos extraordinarios, que además compensan los efectos sobre la deuda de la apreciación de las divisas y el mayor coste", explica este experto.
De cara a 2023, Iberdrola espera que se normalice la producción hidroeléctrica y eólica, que las inversiones superen los 11.000 millones de euros permitiendo la instalación de 3GW adicionales de renovables (500 MW de eólica marina), nuevos marcos tarifarios en Brasil, Estados Unidos y Reino Unido que protejan de la alta inflación y que continúe la rotación de activos.
En negativo, subraya Pérez, cuentan con el registro del impuesto sobre los ingresos en España (aproximadamente 200 millones de euros) y el incremento del coste financiero. Asimismo, la compañía sigue confiando en que el proceso de compra de PNM Resources continúe adelante tras cambios en la Comisión Reguladora de Nuevo México y esperan una resolución favorable en los próximos meses.