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Los analistas consideran que los resultados de los nueve primeros meses del año que Iberdrola ha publicado este miércoles (el beneficio neto mejora un 29% en el periodo, hasta 3.104 millones; el EBITDA sube un 17%, hasta 9.529 millones) han sido "buenos", y "han batido ligeramente las estimaciones del consenso".
Según explica Bankinter, las cifras se han visto favorecidas por la positiva evolución de la división de redes, la nueva capacidad en renovables y el impacto favorable de los tipos de cambio.
Bankinter subraya que la evolución de las principales divisas de referencia ha tenido un impacto positivo en resultados (6% del EBITDA y 2% en beneficio neto atribuible). El dólar se ha apreciado un 12% en el periodo; el real brasileño, un 16,7%; y la libra, un 2,2%.
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Ángel Pérez, analista de Renta 4, se refiere a la positiva evolución en todas las geografías salvo en España, tal y como ha subrayado la propia compañía, con una caída del beneficio neto en nuestro país del 14%. Pérez remarca el "importante" crecimiento del EBITDA, alineado con las expectativas de Renta 4.
"Destacan la mayor base de activos regulados, mejores tarifas e inflación en Brasil, mayor capacidad renovable instalada y mayor eolicidad, pese a la menor producción hidroeléctrica, la evolución del tipo de cambio en los costes y el efecto negativo de los elevados precios mayoristas en Reino Unido, recogiendo extraordinarios positivos en las redes de Estados Unidos y en producción y clientes, y en España un efecto negativo por una decisión judicial y una orden regulatoria sobre determinados activos", describe este analista.
El equipo gestor de Iberdrola ha reiterado las guías de BNA (beneficio neto atribuible) para 2022, que supone un crecimiento de entre el 8% y el 13%.
"La normalización en los factores de carga, las nuevas inversiones en redes y renovables y el impacto favorable de los tipos de cambio permitirán seguir mejorando el BNA del grupo. Mantenemos la recomendación de compra. Iberdrola es un valor que nos gusta con una perspectiva de medio/largo plazo. El grupo es un ganador en el proceso de mayor electrificación y rápida descarbonización al que se enfrenta el nuevo modelo energético", apuntan desde Bankinter. Destaca el banco el posicionamiento de Iberdrola en renovables y en redes, la diversificación geográfica y "una sólida estructura financiera", que le permite capturar las oportunidades en el nuevo escenario de transición energética.
"Además, Iberdrola mantiene el foco en la retribución al accionista con un crecimiento en dividendo por acción en el periodo 2021-25 superior al 5%. La rentabilidad por dividendo a los precios actuales es 4,7% para 2022", concluye Bankinter.
