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Iberdrola, a través de su filial Neoenergia, se ha hecho con la subasta sobre la privatización de la distribuidora de energía eléctrica CEB Distribuição SA (CEB-D), al presentar una oferta por un importe de unos 400 millones de euros, asi el grupo acelera su presencia en un país estratégico como Brasil.
El grupo de Ignacio Sánchez Galán se hace así con CEB-D, la distribuidora de energía eléctrica del Distrito Federal de Brasilia que suministra electricidad a mas de tres millones de personas. En 2019, la compañía ya tenía 1,1 millones de consumidores y suministró un total de 6.577 gigavatios hora (GWh). La adquisición de CEB-D es un paso alli en línea en la estrategia de expansión de Neoenergia en el sector eléctrico brasileño y lo que les permite sacarse la espina de hace dos años cuando no pudieron hacerse con la distribuidora Eletropaulo, tras una dura 'batalla' con la italiana Enel.
La liquidación de la subasta y la culminación de la adquisición de acciones CEB-D están están sujetas a la aprobación del resultado de la subasta por parte del Comité de Licitaciones, ante la previa aprobación del Consejo Administrativo de Defensa Económica (CADE) y el consentimiento de la Agencia Nacional de Energía Eléctrica (ANEEL). La adquisición de la distribuidora eléctrica brasileña está sujeta además a la junta general de Neoenergia. La oferta presentada por la filial de Iberdrola se ha impuesto ala de Bahia Geração de Energia, cuya puja llegó hasta los 2.508 millones de reales, unos 399 millones de euros. La subasta se lanzó con un precio inicial de 1.400 millones de reales cerca de unos 223 millones de euros.
UNA RED EN BRASIL DE MÁS DE 640.000 KILÓMETROS
Iberdrola, a través de su filial Neoenergia, cotiza en la Bolsa de Sao Paulo, continúa acelerando su apuesta brasileña , donde ya controla una red de distribución de 640.417 kilómetros, llegando a una población de 34 millones de personas. La energética presidida por Ignacio Sánchez Galán cuenta con más de 3.500 megavatios renovables (MW) en operación y da servicio de electricidad a 14,1 millones de clientes.
NUEVE OPERACIONES EN LO QUE VA DE 2020
Iberdrola completa nueve operaciones corporativas este año, a pesar de la pandemia del Covid-19.El pasado octubre anunció la ha sido su operación 'estrella' en 2020, el acuerdo de compra de la americana PNM Resources, por un valor de 7.000 millones de euros. En 2020, el grupo ha dado el salto al mercado japonés, tras la compra de la promotora local Acacia Renewables, con una cartera de proyectos 'offshore' (marina) de 3,3 gigavatios (GW) de potencia, además tambien en Brasil, se hizo con una cartera de proyectos eólicos de 400 MW de capacidad en Brasil. En verano se hizo con el control de la australiana de energías renovables Infigen Energy, tras el lanzamiento de una OPA amistosa, lo que le permite convertirse en uno de los operadores líderes del mercado australiano de renovables.
Sumando a la sueca Svea Vind Offshore AB (SVO) una opción de adquisición mayoritaria para el desarrollo futuro de la mayor cartera de proyectos de energía eólica marina en Suecia, ha adquirido dos proyectos eólicos terrestres en Escocia, que suman 165 MW de capacidad y cuyo desarrollo implicará una inversión de alrededor de 190 millones de euros, y se hizo con la francesa Aalto Power por algo más de 100 millones de euros y con el 100% del capital del parque eólico marino francés Saint-Brieuc.
