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A un mes para el Brexit, IAG mantiene la calma. El holding de Iberia, British Airways, Vueling y Aer Lingus afirma que sigue "evaluando y preparándose para los posibles cambios" que se produzcan tras la desconexión de Reino Unido del bloque europeo, pero asegura que "no tiene la impresión de que el Brexit vaya a tener un impacto significativo en el negocio a largo plazo".
Así lo explica el grupo que dirige Willie Walsh en el informe anual enviado a la CNMV, donde sigue marcando el Brexit como un riesgo comercial y operativo, junto con la volatilidad de los precios del combustible. Aun así, IAG mantiene la esperanza de que Bruselas arregle el asunto y se alcance "un acuerdo amplio en materia de transporte" entre la UE y Reino Unido, ha afirmado su consejero delegado, Willie Walsh, en la conferencia con analistas para explicar los resultados anuales.
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Iberia tendrá dos semanas para explicar cómo ajustará su accionariado tras el BrexitEl grupo de aerolíneas ha estado en el foco a causa de su estructura accionarial y de la potencial pérdida de derechos de vuelo si se produce un Brexit sin acuerdo. Conforme a la normativa de la UE, la propiedad y control de las aerolíneas europeas debe estar en manos de ciudadanos comunitarios, es decir, al menos un 50% del capital.
En el caso de IAG, la fragmentación de su accionariado y la sede en Londres ha complicado la situación y ha derivado en una carrera a contrarreloj para demostrar su españolidad en la que el Gobierno español se ha posicionado de su parte para asegurarse de que Iberia y Vueling no se vean afectadas. Están en juego los 18 millones de turistas británicos que visitan España cada año.
El grupo afirma que "ha mantenido amplias conversaciones con todos los reguladores y gobiernos y confía en que cumplirá con las reglas de estructura de propiedad y control de la UE y Reino Unido" una vez se materialice la ruptura. "IAG es una compañía española sus aerolíneas cuentan con certificados de operador aéreo establecidos y modelos de negocio definidos en Irlanda, Francia, España y el Reino Unido, e IAG ha tenido otras estructuras y salvaguardas en sus estatutos desde que se estableció en 2011", ha subrayado Walsh.
El holding se refiere a las medidas de blindaje para que una excesiva proporción de accionistas no UE en su capital pongan en riesgo su operación, como contó este medio. El grupo, que activó este blindaje a principios de febrero y bloqueó el capital no comunitario en el actual 47,5%, tiene la opción de exigir la venta de las acciones no UE en un período de 10 días. Aun así, IAG no ha aclarado el estatus que tendrían sus accionistas británicos. El grupo los excluyó de la categoría no comunitaria al activar el blindaje pero, en caso de Brexit sin acuerdo, el alrededor del 20% de su capital en manos británicas complicaría la situación.
PRÓRROGA POST-BREXIT
Walsh insiste en que IAG ha trabajado en planes de contingencia que le preparan para un escenario de "no acuerdo", pero confía en que la UE y Reino Unido lleguen a un acuerdo transitorio que les de hasta diciembre de 2020 como plazo para cumplir con la normativa europea en caso de que se le exijan cambios en su estructura accionarial.
"En concreto, hemos detallado y entablado diálogo constructivo con los reguladores nacionales y gobiernos sobre la propiedad y control de la compañía. Estas discusiones continúan e implican también a la Comisión Europea", ha detallado el CEO de IAG.
"Implemementaremos el plan apropiado en el momento oportuno", ha indicado Walsh. Según el ejecutivo, el holding baraja varias opciones, pero no se va a plantear ninguna medida adicional mientras Bruselas y Londres sigan trabajando para lograr un acuerdo para culminar el Brexit.
La UE está dispuesta a mantener el status quo después del 29 de marzo durante seis meses extra para garantizar la conectividad con Reino Unido, pero el Gobierno británico tendrá que asegurar la reciprocidad de trato para las aerolíneas europeas. Para acogerse a esta prórroga, las compañías tendrán un plazo de dos semanas desde que entre en vigor el reglamento de la UE preparado para un Brexit duro para explicar detalladamente cómo reestructurará su capital para cumplir con la normativa.