El Ministerio de Hacienda y Función Pública se ha puesto como objetivo cerrar con Unidas Podemos la Ley de Vivienda dentro de la negociación de otra gran norma, los Presupuestos Generales del Estado de 2022. Ambas formaciones ya han empezado a discutir esta última.
Así, según han informado fuentes gubernamentales, la intención del departamento de María Jesús Montero es poder iniciar las conversaciones con los socios parlamentarios con un acuerdo con Unidas Podemos para impulsar las nuevas cuentas, pero también la nueva Ley de Vivienda.
Este punto formó parte del acuerdo entre PSOE y los morados para los actuales Presupuestos, incluyendo la aprobación en enero de la norma en el Consejo de Ministros e iniciar un mes después su tramitación parlamentaria. Para ello, según lo firmado, se debía contemplar una regulación de los alquileres y posibilitar su rebaja en las zonas más tensionadas.
Sin embargo, las reticencias del PSOE a la hora de desarrollar esta regulación, apostando por incentivos fiscales y no por posibilitar la intervención de las administraciones, ha encallado las negociaciones. El retraso alcanza ya los siete meses y Unidas Podemos no acepta otra fórmula que no sea la de poder 'congelar' y bajar los alquileres en zonas tensionadas.
EL ALQUILER PROTAGONIZARÁ LAS NEGOCIACIONES
Desde Hacienda están convencidos de que la regulación de los alquileres protagonizará las conversaciones para impulsar a Presupuestos y en alcanzar un acuerdo para impulsarla. No solo por la importancia que tiene este compromiso para el grupo confederal, sino también por el retraso que acumulan. "Si no, a este paso, no habrá Ley de Vivienda", señalan estas fuentes.
Hasta ahora, las negociaciones para esta regulación las han liderado el exministro de Transportes José Luis Ábalos y la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, que ahora deberá lidiar con la nueva titular de las competencias de Vivienda, Raquel Sánchez.
Hace precisamente una semana, la vicepresidenta segunda y líder de Unidas Podemos, Yolanda Díaz, ya advirtió de que el acceso a una vivienda sería uno de los ejes principales a la hora de negociar los Presupuestos, así como el despliegue de las políticas de cuidado, la reforma fiscal o las políticas contra la precariedad laboral.
En el caso de los Presupuestos, Díaz señaló al secretario de Estado de Belarra, Nacho Álvarez, como la persona dentro del espacio confederal encargada de liderar las negociaciones con María Jesús Montero.
PRIMERO UNIDAS PODEMOS Y, TRAS LAS VACACIONES, LOS SOCIOS
Estas conversaciones se iniciaron de cara a fijar primero el límite de gasto no financiero, el conocido como 'techo de gasto', que se mantiene respecto al año pasado en 196.142 millones de euros, incluyendo las transferencias extraordinarias a las comunidades autónomas y Seguridad Social y parte de los fondos europeos. Excluyendo los fondos europeos, se quedaría en 169.787 millones, un 0,7% más que el pasado año.
Desde el Gobierno aseguran que no contemplan una prórroga de las actuales cuentas y que confían en poder sacar adelante unas nuevas cuentas. En todo caso, señalan que una prórroga no impediría la ejecución de fondos europeos, que ven posible plasmar en proyectos con los Presupuestos de este año prorrogados.
Respecto a los tiempos, Hacienda confía en poder iniciar las negociaciones con sus socios del Congreso tras las vacaciones de verano, una vez se cierre un acuerdo con Unidas Podemos, y citan como parte de esas conversaciones a grupos como el PNV, Esquerra Republicana, Más País-Equo o Compromís, grupos que ya dieron el 'sí' a las cuentas de 2021.