Grifols "continúa planteando un enigma desafiante", aseguran los analistas de Deutsche Bank, que recortan el precio objetivo de la compañía hasta los 16 euros por acción, frente a los 17 euros previos. La recomendación sigue sin cambios al fijarse en un 'mantener'.
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Como detallan en un reciente informe, "el apalancamiento financiero parece casi navegable y deberíamos estar en la cúspide de una operación significativa y la recuperación del margen dado que las cobranzas son un indicador principal sólido y el gráfico parece muy saludable".
Por otro lado, Deutsche Bank también destaca que "la recuperación de ingresos/EBITDA parece estar tardando un poco más de lo esperado en salir adelante, el debate sobre los riesgos estructurales del mercado no desaparecerá pronto y el apalancamiento elevado sigue siendo una consideración no trivial".
Grifols registró entre enero y junio un beneficio de 143,6 millones de euros, una cifra un 46% menor que en el mismo período del año anterior, algo que la compañía achacaba a la "consecuencia de los mayores gastos financieros derivados de la adquisición de Biotest".
