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Naturgy está inmersa en la ejecución de su plan estratégico con horizonte 2022, una hoja de ruta que incluye medidas de eficiencia para reducir sus costes en 500 millones. Esta reestructuración combinada con su crecimiento -tanto orgánico en negocios regulados como la recuperación del liberalizado- y una gestión orientada a la optimización, hacen que la compañía sea "atractiva" para su adquisición.
Así lo expone Goldman Sachs en su último informe Alpha Opportunities sobre empresas europeas en el que incluye, además de a la energética, a Masmóvil y a Colonial, en su listado de compañías con más probabilidad de ser vistas como "objetivos estratégicos".
"El equipo directivo está centrado en la creación de valor para los accionistas y nuestros analistas estiman que Naturgy pagará en efectivo a sus inversores un 30% de su capitalización en los próximos cuatro años después de haber devuelto un 6% en 2018", apunta Goldman Sachs. "Que la dirección esté centrada en la optimización de la cartera de activos sugiere un potencial a largo plazo de simplificación y coloca a la compañía como un objetivo atractivo para la adquisición", añade.
Esa simplificación subraya los planes de la compañía de estrechar su perímetro: Naturgy se ha marcado como meta reducir su presencia de 30 países a menos de 10 en la que España supondrá como máximo un 40% del negocio y las otras nueve geografías un 50% como mínimo. Además, se quiere elevar el peso de los negocios regulados del 52% al principio del plan hasta un 70% y que la electricidad gane terreno al gas, en una proporción 50-40%, frente al 40-57% actual.
No es la primera vez que Goldman subraya la transformación de la cartera de activos como uno de los puntos fuertes de Naturgy. El objetivo marcado en el plan estratégico es de 3.000 millones en desinversiones, de los cuales le quedaría por ejecutar alrededor de 150 millones tras cerrar este mes la venta de sus activos en Moldavia a Duet Private Equity.
Ese monto es casi residual y, como señalaban los analistas a principios de año, Naturgy deja la puerta abierta a más desinversiones para apostar por renovables. Su presidente, Francisco Reynés, no descarta la posibilidad, sólo indica que igual que "no vamos a comprar con sobreprecio, no se venderá regalando".
La energética que preside Francisco Reynés quiere acelerar este año su inversión en España. De los 2.000 millones previstos para el ejercicio, el 70% se quedarán aquí. De ese monto, gran parte se destinará al desarrollo del gigavatio de potencia renovable que quiere sumar a su cartera y alrededor de 400 millones se repartirán entre redes eléctricas y de gas.
ACCIÓN, AL LAZA
Bank of America también destaca los "beneficios del plan de ahorro de costes" de Naturgy y ha revisado su precio objetivo para la energética, elevándolo de 23,4 euros a 25,5 euros por acción con recomendación 'neutral'.
Tras cerrar 2018 en el podio del Ibex 35, los títulos de Naturgy cotizan en máximos históricos. En lo que va de año, se ha revalorizado alrededor de un 17%, colocándose este martes en 24,8 euros alcanzados en la sesión de este martes.
