El Gobierno del este de Libia ha anunciado este lunes el cese de toda explotación y exportación petrolera a cuenta del conflicto abierto con el Ejecutivo rival de Trípoli, reconocido a nivel internacional, para dirimir el control del banco central del país.
"El Gobierno designado por la Cámara de Representantes declara el estado de fuerza mayor en todos los yacimientos petrolíferos, puertos e instituciones y paraliza la producción y exportación de crudo en el contexto de los acontecimientos relacionados con el Banco Central de Libia", ha informado la Agencia Libia de Noticias en un comunicado recogido por Europa Press.
La empresa estatal National Oil Corp (NOC) no ha ofrecido confirmación sobre la suspensión de la actividad, aunque la Waha Oil Company, 'joint venture' de la NOC con petroleras extranjeras, sí ha anunciado que planeaba reducir gradualmente la producción y ha advertido de la posibilidad de la interrupción total ante las "protestas y presiones".
La disputa, que llevaría gestándose semanas, supone un motivo de tensión al ser este organismo el gestor de los miles de millones de dólares derivados de la venta de hidrocarburos. En este sentido, Trípoli habría intentado sustituir al gobernador Sadiq al-Kabir, que se negó a dimitir, por lo que esta misma mañana una delegación gubernamental habría entrado en la sede del instituto emisor para forzar su salida.
Las divisiones políticas entre el este y el oeste del país permanecen a pesar del acuerdo de alto el fuego de 2020 respaldado por Naciones Unidas y que aún hoy desembocan en conflictos en torno al 'oro negro' dado su peso en la economía de la nación africana. Libia produjo en total unos 1,15 millones de barriles diarios de crudo el mes pasado.