Un tribunal de Tokio ha concedido este jueves la libertad bajo fianza al expresidente de Nissan, Carlos Ghosn, tras aprobar la solicitud de fianza de su defensa que se ha fijado en 500 millones de yenes (alrededor de 4 millones de euros).
Ghosn, acusado de intentar enriquecerse a costa de su posición como máximo responsable de la firma japonesa, fue arrestado por segunda vez el pasado 4 de abril, casi un mes después de que quedara en libertad bajo fianza por otras acusaciones por las que ya fue detenido en noviembre de 2018.
En concreto, se sospecha que Ghosn habría ocasionado pérdidas de 5 millones de dólares (4,4 millones de euros al cambio) a Nissan hasta julio del año pasado. La agencia de noticias Kyodo informó que este impacto a las cuentas de la multinacional habría surgido a raíz de que se transfiriera fondos desde un concesionario hasta la cuenta de una compañía del directivo.
No es la primera fianza que paga Ghosn: fue liberado en marzo de este año tras abonar una de 1.000 millones de yenes (7,8 millones de euros) tras haber sido arrestado en Japón por supuestos delitos fiscales con agravante de ruptura de confianza.
Esta segunda detención de Carlos Ghosn llegaba exactamente un día después de que el expresidente de Nissan asegurase a través de las redes sociales que estaba "preparado" para "decir la verdad sobre lo que está pasando"; y convocaba una rueda de prensa para el jueves de esta semana.
Por su parte, el expresidente de Nissan, que también lo fue de Renault, afirma ahora que todas las acusaciones forman parte de un complot.