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LetterOne tiene luz verde para lanzar su opa voluntaria a 0,67 euros por acción sobre DIA. El principal accionista de la cadena de supermercados, con un 29% del capital, advierte ya a los inversores de que el camino para que la compañía se recupere será duro: la compañía no generará caja, beneficio ni pagará dividendo durante los primeros años de su plan de transformación.
Según el fondo del magnate Mijaíl Fridman, DIA está "en una situación complicada" como lo confirman los últimos resultados y la posición "insostenible" de deuda que ha acumulado de alrededor de 1.700 millones de euros, según el balance. Como justificación para lanzar su oferta subraya que es necesario recapitalizar la compañía, pero que para "empezar la recuperación", DIA tiene que "cambiar profundamente su propuesta de valor y la inversión en la red de tiendas".
Este lavado de cara empezará por la renovación del equipo de gestión y su Consejo de Administración, las 'caras nuevas' que se encargarán de ejecutar el plan de transformación integral a cinco años basado en seis pilares y que liderará y supervisará LetterOne.
"Durante los dos primeros años del plan, DIA no generará caja ni resultados positivos. No es realista prometer a los accionistas la creación de valor antes de que pasen cinco años", apunta LetterOne en el folleto remetido a la CNMV. añade a esto que no ve "realistas" las expectativas financieras dadas por el equipo de Borja de la Cierva que apuntan a un incremento de Ebitda y de ingresos del 5%.
"Los resultados de DIA se han visto significativamente deteriorados en los últimos años y no existe una solución rápida a la complicada situación en la que se encuentra", añade LetterOne antes de recordar las tres condiciones para que ponga en marcha este plan de salvación para la cadena de supermercados. "El resultado positivo de la opa, el nombramiento de la mayoría del Consejo y un acuerdo con los bancos acreedores son condición para acometer el plan".
Además de contratar "nuevo liderazgo y fomentar el talento existente", LetterOne basará su plan en una nueva estrategia para la red de tiendas con el objetivo de mejorar las ventas y maximizar el tráfico por local, observando "potencial para la apertura de nuevas tiendas en España". Pero antes será necesario "un exhaustivo programa de remodelaciones". Para mejorar las ventas, en tanto, pondrá en marcha una nueva propuesta de valor comercial, reajustará precios y promociones.
El plan se aplicará también a las tiendas en Brasil, Argentina y Portugal, pero deja fuera a Clarel y Max Descuento, que mantiene a la venta. Los fondos obtenidos se destinarán a financiar el plan de transformación, recuerda LetterOne.
ACUERDO CON LA BANCA
LetterOne mantiene su intención de no amortizar deuda financiera, salvo los bonos que vencen este verano (305 millones), que asciende a 1.691 millones, ni el repago de casi 200 millones de las líneas de confirming, ni los 121,4 millones de las líneas de factoring. Su objetivo es cerrar un acuerdo con la docena de bancos acreedores -liderados por Santander y Caixabank-, para que todos los vencimientos queden aplazados hasta 2023. Cinco años sin deuda para poder desplegar su plan y que la compañía vuelva a crecer.
La ampliación de capital de 500 millones que realizará si la opa tiene éxito se destinará al pago de los bonos que vencen en julio y al crecimiento de la compañía. Como no prevé que DIA genere efectivo durante los dos primeros años, ya avanza que se consumirán entre 200 y 250 millones debido a las inversiones en margen, opex y capex. Pero LetterOne cuenta con que la venta de Clarel y Max Descuento le aporten 100 millones en efectivo para su plan y solicita de los bancos líneas de confirming y factoring de 170 millones, adicionales a los 145 ya concedidos.
LetterOne recuerda que, con las condiciones para su ampliación de capital cumplidas, está dispuesto a inyectar capital a DIA antes de ejecutar el aumento. La vía es un préstamo participativo "que se repagaría con los fondos resultantes del aumento de capital de 500 millones una vez ejecutado".
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LetterOne tiene dos meses para tomar el control de DIA y evitar la quiebraSIN DIVIDENDO A LA VISTA
LetterOne mantendrá la suspensión del dividendo a la espera de que "los resultados del plan sean perceptibles". DIA suspendió el dividendo el pasado mes de octubre, cuando lanzó el profit warning sobre las cuentas de 2018. Pero el fondo de Fridman lanza una advertencia: si recupera el dividendo, no tiene por qué hacerlo bajo la antigua política de la compañía.
"La futura política podrá ser sustancialmente diferente y puede no ofrecer un rendimiento tan elevado como el que se ha ofrecido históricamente", apunta.
PATATA CALIENTE AL CONSEJO
El camino es oscuro, pero LetterOne advierte que cualquier camino alternativo para DIA no es mejor. "Si la opa no tiene un resultado positivo o si las condiciones para el aumento de capital no se cumplen existen riesgos significativos para todos los accionistas".
En el folleto, el brazo inversor de Fridman hace malabarismos con las condiciones para recordar que si su plan fracasa (la opa no alcanza la aceptación mínima; no se hacen con el control del Consejo y no logran acuerdo para aplazar la deuda con la banca) no habrá inyección de dinero que salve a DIA de la quiebra y será el actual Consejo el que tenga que "encontrar soluciones para revertir la situación de patrimonio neto negativo".
Según el documento enviado al regulador, DIA necesita 130 millones para restablecer el equilibrio patrimonial y, desde la junta del pasado 20 de marzo, tiene un plazo de dos meses para convocar de nuevo a los accionistas y declarar la insolvencia. Otra de las situaciones que podría darse para revertir la causa de disolución es que la banca capitalice la deuda, recuerda LetterOne.
ACEPTACIÓN DE LA OPA
De acuerdo a la ley de opas, LetterOne tiene ahora un plazo de cinco días para publicar la oferta y los 23 días que ha fijado como plazo de aceptación darán comienzo el día hábil bursátil siguiente al primer anuncio. El fondo avisa de que la aceptación comenzará "previsiblemente" el 1 de abril y acabará el día 23.
"Los accionistas que decidan no aceptar la OPA con sus acciones harán más difícil el cumplimiento de la condición de aceptación mínima de la OPA, lo que conllevaría que la OPA no tuviese un resultado positivo", subraya LetterOne a través de un comunicado en el que advierte de que los accionistas que no aprovechen la opa "compartirán el importante riesgo de ejecución" de su plan.
Cabe la posibilidad de que extienda el período de aceptación hasta los 70 días naturales. Si su opa tiene éxito y todos los accionistas a los que se dirige la oferta aceptan, LetterOne se hará con DIA por 296 millones. Además, si LetterOne supera el umbral del 90% del capital ejercitará el derecho de venta forzosa (squeeze-out), lo que conllevará la exclusión de la negociación de dichas acciones.