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Teletrabajo, cierres de plantas y ERTEs, son las tres vías que se abren para las empresas en medio de la alerta global por el coronavirus. Cuando el brote del virus ya ha dejado en España 261 casos confirmados y cuatro muertos no queda ni una sola compañía que no esté ensayando planes de contingencia para prevenir el contagio entre sus empleados, después de que el Ministerio de Trabajo haya recomendado echar el cierre en caso de estar en riesgo de expansión del Covid-19. 'Ernst and Young' ya ha mandado a sus 3100 trabajadores de Madrid a casa, Puig ha tomado medidas similares con parte de su plantilla e Indra ha cerrado temporalmente dos plantas de un edificio en Barcelona.

Los casos de coronavirus en el mundo se acerca al número de 100.000 y el virus respiratorio ha provocado la muerte de más de 3.281 personas. Además del incontestable drama humano, los estragos económicos afectan a los mercados financieros, ya que se descuentan los fallos en cadenas de suministros globales y en la actividad empresarial. La producción de las empresas está en juego en un momento en que ya se palpaba un frenazo de la actividad manufacturera global. Pero antes que un parón generalizado de la actividad, los expertos aseguran que el Covid-19 dará el espaldarazo definitivo al teletrabajo en nuestro país, como solución para empresas de oficinas y de servicios a otras empresas.

En el caso de 'Ernst and Young', la decisión se ha adoptado después de que se haya hallado "un empleado asintomático con coronavirus", según ha informado la compañía. Indra también ha movido ficha después de saber que dos de los profesionales de su centro de Roc Boronat (Barcelona), están infectados, según ha confirmado un portavoz oficial de Indra en Europa Press. La multinacional catalana Puig ha acordado que ocho de sus empleados trabajen desde casa después de haber estado en contacto con una persona externa a la compañía que ha dado positivo en una maceta de coronavirus.

Son tres de los casos que han trascendido en las últimas horas, pero el goteo de empresas que adopta soluciones similares es imparable. Esta semana, Telefónica ha recomendado a su plantilla de Madrid teletrabajar tras detectar su primer caso de coronavirus. Otra 'helecho', Vodafone España mandará a teletrabajar a los 2.200 empleados de su sede central para prepararse contra el coronavirus y se prepara para un simulacro este viernes para comprobar que puede dirigir en remoto la compañía en caso de que se agrave la crisis, según informa 'El País'.

También BBVA ha trasladado a alrededor de un centenar de trabajadores de su equipo de Mercados desde la sala de tesorería de la Ciudad BBVA a la que tiene en Las Rozas como medida de prevención ante la expansión del coronavirus. Todavía en el sector bancario, HSBC Holdings ha desalojado el departamento de Research de su sede de Londres después de detectar un positivo por coronavirus entre sus empleados, según recoge 'Bloomberg'. La última hora pasa por Bankia que ha registrado el primer caso de coronavirus Covid-19 de un profesional de los servicios centrales en su sede de Madrid, por lo que el banco ha activado su Protocolo de Actuación y Prevención. Los profesionales que desarrollan su actividad en la planta donde trabaja continuarán su labor a través del teletrabajo.

En el mundo tecnológico, Facebook ha enviado este jueves a sus empleados a casa y cancelado todos sus viajes. Además, ha cancelado también todos los eventos que tenían previsto tener lugar en el área de San Francisco, incluido el popular F8. Twitter ha pedido a los alrededor de 5.000 trabajadores de la compañía que trabajen desde sus casas en la medida que esto sea posible, debido al coronavirus, y ha indicado que el teletrabajo será obligatorio en los casos de las oficinas de la empresa en Hong Kong, Japón y Corea del Sur. El virus ha dejado un total de once fallecidos en Estados Unidos y afecta a casi 130 personas, el miércoles.

Además, el virus ataca con virulencia el negocio de los eventos, congresos y viajes de empresas. La cancelación del Mobile World Congress de Barcelona fue sólo al punta del iceberg. El segmento de los viajes de negocios, que mueve 20.000 millones al año, según 'Expansión', está recibiendo un fuerte impacto. Sin ir más lejos, Fira de Barcelona ha decidido aplazar la celebración del salón internacional Alimentaria, que estaba previsto del lunes 20 al jueves 23 de abril al recinto de la Gran Vía de l'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), hasta septiembre por el coronavirus, ha informado este jueves en un comunicado.

El congreso y salón de la farmacia, Infarma Madrid 2020, ha adoptado la "difícil y "triste" decisión de aplazar su celebración ante la situación "imprevisible e inevitable" generada por la incidencia del coronavirus, pero entienden que es lo "acertado" desde el punto de vista sanitario. Se suma al anunciado este miércoles por Expodental que iba a celebrarse en las instalaciones de Ifema del 12 al 14 de marzo y se ha trasladado al mes de julio.

Además, la empresa organizadora del World ATM Congress 2020 ha decidido cancelar el evento, que iba a tener lugar en el recinto ferial Ifema de Madrid del 10 al 12 de marzo, siguiendo las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

GUÍA DEL MINISTERIO

El Ministerio de Trabajo y Economía Social ha publicado una guía para empresas y trabajadores con recomendaciones para actuar ante posibles casos de coronavirus en el entorno laboral. El departamento que dirige Yolanda Díaz ha lanzado este texto en el que también se incluyen medidas preventivas y para evitar el contagio entre los empleados.

Entre otras cuestiones, en la misma se señala que las empresas deberán proceder a paralizar la actividad laboral en el caso de que exista un riesgo "grave o inminente" de contagio por coronavirus en el centro de trabajo.

No obstante, apuesta por activar medidas que permitan el desarrollo de la actividad laboral de forma alternativa o bien, si es necesario, la adopción de medidas de suspensión temporal de la actividad.

Asimismo, el Ministerio ha señalado que el teletrabajo podría adoptarse, por acuerdo colectivo o individual y de carácter excepcional, como una medida para desarrollar las tareas imprescindibles que pueden desarrollarse en el centro físico habitual.

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