Endesa acaba de desvelar a los inversores cuáles son los parámetros en los que espera moverse durante los tres próximos años. En el lado positivo: su transformación 'verde' y una creciente inversión en España. En el negativo, un significativo recorte al dividendo, que se mantendrá en el largo plazo. Y hay otra arista: su deuda neta, que va a despegar más de un 47% entre 2018 y 2022, cuando concluya su plan estratégico. Alcanzará, si cumple sus previsiones, los 8.500 millones de euros.
- 20,270€
- 2,27%
Al finalizar el último ejercicio completo, el 2018, la filial del grupo italiano Enel (que controla el 70% del capital) asumía una deuda financiera neta por importe de 5.770 millones de euros. Y ésta ya caminaba al alza, porque había elevado este pasivo neto en 785 millones en comparación al año previo. Además, señaló en su informe anual que, a finales del pasado diciembre, el coste medio de esa deuda ascendía al 1,9%.
Y ese crecimiento sigue siendo palpable en 2019. Al finalizar los nueve primeros meses del año, Endesa explicaba en su informe trimestral que su deuda financiera neta se había elevado en 1.455 millones, hasta los 7.225 millones de euros.
El motivo principal, el pago del dividendo, del que el 70% va a parar a manos de su dueño italiano. En estos nueve primeros meses de 2019, Endesa “ha pagado a sus accionistas dividendos por un importe de 1,427 euros brutos por acción, lo que ha supuesto un desembolso de 1.511 millones de euros”, asume en el citado informe. Además, las nuevas normas contables, le han obligado a asumir 271 millones en concepto de arrendamiento.
8.800 MILLONES ENTRE DEUDA Y CAJA
En los próximos tres años, la compañía dirigida por José Bogas recalca que tiene afán de crecer y que prevé que su deuda crezca en 2022 hasta los citados 8.500 millones de euros, según el plan estratégico que presentó a los inversores en Milán la pasada semana. A ellos sumará como ‘colchón’ otros 300.000 euros en concepto de caja y equivalentes. Una cifra que mantiene estable, porque no varía desde 2018.
Noticia relacionada
El precio de decir adiós al carbón: Endesa invertirá 6.300 millones en su giro 'verde'Endesa explica este relevante crecimiento de su pasivo por su proyección de crecimiento en España, tanto orgánico, como inorgánico. En cuanto al primero, su nuevo plan estratégico conlleva elevar en un 14% sus inversiones hasta 2022. Alcanzarán, si cumple sus objetivos, los 6.300 millones de euros. De ellos, 3.800 millones irán a aumentar su capacidad de producción renovable. En cuanto al segundo, quiere comprar, en un sector donde las oportunidades no son excesivas. Una de las que está sobre la mesa es Zero-E, la división ‘verde’ del grupo constructor ACS.
AUMENTA EL COSTE DE LA DEUDA
Endesa también prevé que crezca el coste de su pasivo. En la presentación del nuevo plan estratégico remitido a la CNMV, la eléctrica indica que contempla concluir 2019 con un coste de su pasivo del 1,8% y que éste alcanzará el 2,1% al concluir 2022.
Pese a este previsible repunte, su responsable financiero, Luca Passa, destacó la pasada semana, en la conferencia con analistas de presentación del plan, que ese porcentaje es más bajo que el de sus competidores y destacó que hay que tener en cuenta el escenario de una subida de tipos en el horizonte. “Veremos que hacen los tipos, es una previsión conservadora”, recalcó.