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Gestamp presentó sus resultados del tercer trimestre de 2018 este lunes tras el cierre del mercado. La compañía anunció un beneficio neto de 31,1 millones, lo que implica una caída del 14% frente al mismo periodo de hace un año.
La empresa controlada por la familia Riberas ha explicado que el ajuste contable realizado por la hiperinflación en Argentina ha restado 3,2 millones de euros al beneficio trimestral.
Los expertos de Renta 4 valoran este martes estas cifras y concluyen que cumplen a nivel operativo pero que quedan "muy por debajo de lo previsto en resultado neto debido al mayor gasto financiero".
"No esperamos impacto significativo en la cotización, que ha caído un 20% en los últimos tres meses. Hemos revisado a la baja nuestras estimaciones para tener en cuenta un entorno del sector más complejo: impacto WLTP, Brexit, desaceleración económica, principalmente en países emergentes, tensiones comerciales y aranceles y peor comportamiento de las divisas emergentes", explican estos expertos. Renta 4 también baja su precio objetivo sobre Gestamp hasta 7,4 euros desde los 8 euros previos, con un consejo de sobreponderar.
Durante el tercer trimestre, el Ebitda de Gestamp aumentó un 11,9%, hasta 196 millones de euros. Los gastos financieros netos subieron un 55,2%, hasta 34,3 millones de euros. Las pérdidas por diferencias de cambios ascendieron a 11,4 millones de euros, frente a los 2 millones de euros del tercer trimestre de 2017.
La directiva mantiene los objetivos 2018 operativos (que excluyen divisa) si bien prevé que el mayor nivel de capex les llevará a cerrar el año con un múltiplo deuda neta/EBITDA superior al objetivo anterior (en torno a 2,2x).
