Estados Unidos ha impuesto restricciones a varias empresas chinas, entre ellas un fabricante de chips, ante preocupaciones de seguridad nacional, debido, según la administración de Joe Biden, a sus esfuerzos para utilizar tecnologías avanzadas para ayudar a modernizar el ejército de China.
Según detalla la Oficina de Industria y Seguridad del Departamento de Comercio en un comunicado de prensa, las 36 entidades se enfrentarán a "requisitos de licencia estrictos" que dificultarán su acceso a ciertos productos, software y tecnologías producidos en EEUU, incluida la inteligencia artificial.
Además, explican que este movimiento protegerá la seguridad de EEUU al frenar la capacidad de Beijing para "aprovechar la inteligencia artificial, la computación avanzada y otras tecnologías poderosas disponibles comercialmente para la modernización militar y los abusos a los derechos humanos".
Por otro lado, la administración de Biden también ha asegurado que levantará algunas restricciones sobre un total de 25 entidades chinas que cumplieron con éxito con los controles de EEUU para verificar que sus productos exportados se estaban utilizando de la manera que afirmaban las entidades.
