- La compañía hotelera ha asegurado que lanzó una oferta que entienden como "razonable"
- Barceló confirmó que no está en los objetivos de los próximos años sacar al mercado la compañía
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El grupo hotelero Barceló Hotel ha disipado cualquier salida a bolsa y ha declinado esta opción después que no se produjese la operación de fusión con NH Hotel Group. La intención de la compañía durante los próximos años será la de continuar los proyectos de inversiones de manera significativa durante los próximos años especialmente en la zona de Oriente Medio para poner en valor su capacidad financiera.
Días después de que se hiciese oficial que la operación de fusión con NH no se consumará por el rechazo total del consejo de administración, el grupo mallorquín se considera ahora en la obligación de mirar adelante y continuar con sus planes de inversión. "No nos vamos a quedar quietos", aseguró el consejero delegado de la zona EMEA (Europa, Oriente Medio y África) de la hotelera, Raúl González en un acto celebrado en Madrid.
Barceló cerró 2017 con una facturación de 2.700 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 10% respecto al año
No obstante, la compañía hotelera ha asegurado que lanzó una oferta que entienden como "razonable" puesto que creaba valor para los accionistas de ambos grupos que fue rechazada "de forma un tanto abrupta". "Eso no quiere decir que no haya plan B, hay planes para hacer cosas, no nos vamos a quedar quietos. A lo largo de 2018 hay algunas operaciones previstas que intentaremos llevar a cabo", explicó el directivo asegurando que la compañía destinará su capacidad financiera a las operaciones que considere más convenientes.
En este punto, Barceló asegura que se encuentra "trabajando, escuchando y analizando" diferentes opciones "tanto en esta parte del mundo como en otra". "No podemos destinar toda esa capacidad de financiación a crecimiento orgánico, así que hay que pensar en compras corporativas", confirman desde la compañía"
"Si surgen activos compraremos. Mientras la compaña siga siendo familiar buscará activos entre propiedad, alquiler y gestión (prácticamente repartidos a tercios). Nuestro objetivo es mirar donde invertir y comprar activos siempre que sean rentables", justificó.
Barceló confirmó que no está en los objetivos de los próximos años sacar al mercado la compañía, puesto que este movimiento "tiene muchas ventajas", pero también "muchos inconvenientes". "Hay que estudiarlo bien", por lo que no se lo plantea.
Para González lo importante es "hacer bien las cosas y luego ya se verán las operaciones que se llevan a cabo". "Queremos reforzar el papel gestor de la compañía. Queremos ser la mejor gestora y ser una referencia. Eso pasa por ofrecer la mejor experiencia al cliente", añadió.
2017, UN BUEN AÑO PARA LA EXPANSIÓN DEL GRUPO
Coincidiendo con la celebración de la 38ª edición de Fitur, Barceló presentó este miércoles ante los medios de comunicación su balance de expansión de 2017 y planes de crecimiento para 2018.
Barceló cerró 2017 con una facturación de 2.700 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 10% respecto al año anterior, y un resultado de explotación (Ebitda) ligeramente por debajo de los 500 millones, también un 10% superior --si se incluyen los extraordinarios como la venta de su participación en la socimi Bay a Hispania el crecimiento es del 46%--.
El reparto de la facturación sería a partes iguales entre hoteles y viajes. La zona EMEA facturó por encima del los 600 millones, de los cuales España supone entorno al 75%, por debajo de los 500 millones de euros.
Con estos datos la compañía estima que la capacidad de inversión de la compañía se mantenga de forma "igual o superior" durante los próximos años en un entorno de 300 millones de euros anuales. En el periodo 2012-2017 el grupo ha invertido más de 1.500 millones de euros en reformas y compras.
"Por tanto, la compañía se quedará esta primavera prácticamente con deuda cero y tipos de interés bajo con lo que tenemos que invertir. Somos una compañía inquieta y habrá que hacer inversiones", confirmó el consejero, que avanzó que en Riviera Maya están preparando la fase cuatro del complejo maya de 800 habitaciones que mejorarán el nivel.
El director de desarrollo de negocio, Jaime Buxó confirmó que el pasado año fue un año "excelente" en términos de crecimiento para la compañía que ha incorporado un total de 10 hoteles y 2.520 habitaciones que han permitido elevar su portfolio a 236 establecimientos y 52.319 habitaciones en 22 países.
La compañía destaca que entre sus principales objetivos mantener el crecimiento en España y reforzar su presencia en los países de la cuenca mediterránea como Turquía, Egipto o Marruecos que considera que tienen un importante margen de crecimiento durante los próximos años. "Evidentemente hay un cierto riesgo que hay que asumir y analizar bien los destinos turísticos para crecer donde haya oportunidades y procesos de crecimiento", indicó González.
Barceló cuenta en la actualidad con 27 proyectos firmados y comprometidos para aperturas en los tres próximos años, 10 de los cuales se han abierto en 2017. Los 17 hoteles restantes, que supondrán otras 2.500 habitaciones están ubicados principalmente en destinos urbanos.
APUESTA POR ORIENTE MEDIO
Emiratos Árabes Unidos es una de las nuevas apuestas de Barceló Hotel Group, donde el grupo quiere copar la franja de establecimientos de gama media-alta que aún ofrece un amplio margen de crecimiento.
El objetivo de la compañía es conseguir alcanzar los siete hoteles en Emiratos Árabes a finales de 2018, una posición que espera alcanzar con facilidad teniendo en cuenta que ya tiene tres operaciones firmadas. La implantación del grupo mallorquín en este mercado se va llevar a acabo de manera progresiva, y de momento con contratos de gestión.
Barceló estudia también nuevos partners en China tras la fallida operación con el gigante Plateno que les ha llevado a tener únicamente dos hoteles en la región. La cadena hotelera española firmó un acuerdo de franquicia en verano de 2016 con Plateno con el objetivo de ceder la explotación de su marca e implantarla en un centenar de hoteles de este país asiático en una década.
Según explicaron, ir a China para tener "dos o cinco hoteles no es eficiente. Es una zona en la que hay que estar con mucho tamaño". "En China más que un crecimiento significativo lo que buscamos es una estrategia de conocimiento del mercado y reconocimiento de la marca para iniciar una posterior expansión en el sudeste asiático", concluyó González.