MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
El grupo Restaurant Brands International (RBI), dueño de las cadenas Burger King, Tim Hortons y Popeyes, contabilizó un beneficio neto atribuido de 280 millones de dólares (256 millones de euros) en el segundo trimestre del año, lo que equivale a un aumento del 16,2% en comparación con el resultado del mismo periodo de 2023.
La facturación del grupo alcanzó entre abril y junio los 2.080 millones de dólares (1.905 millones de euros), un 17,2% más, incluyendo 347 millones de dólares (318 millones de euros) procedentes de los restaurantes en régimen de explotación directa, que quintuplicaron los ingresos del mismo periodo del año pasado.
Asimismo, los ingresos derivados de las distintas franquicias del grupo sumaron en el segundo trimestre un total de 747 millones de dólares (684 millones de euros), un 0,7% más, mientras que por publicidad y otros servicios RBI facturó otros 304 millones de dólares (278 millones de euros), un 5,2% más que un año antes.
De su lado, los costes por operaciones del grupo norteamericano aumentaron en el trimestre un 16% respecto del mismo intervalo de 2023, hasta un total de 1.417 millones de dólares (1.297 millones de euros).
De este modo, en el primer semestre de 2024 la compañía obtuvo un beneficio neto atribuido de 510 millones de dólares (467 millones de euros), un 18,6% por encima del resultado anotado en la primera mitad de 2023, mientras que la cifra de ingresos progresó un 13,5% anual, hasta los 3.819 millones de dólares (3.497 millones de euros).
"Nuestras prioridades y el equilibrio entre inversiones bien pensadas y disciplina de costes nos permiten sortear las presiones de los consumidores a corto plazo y generar resultados sostenibles para nuestro negocio y nuestros franquiciados", destacó Josh Kobza, consejero delegado de RBI.