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Archivo - Una persona recoge uvas de una cosecha durante la temporada de vendimia Patricia Galiana - Europa Press - Archivo

MADRID, 12 (EUROPA PRESS)

España, Francia e Italia han coincidido en destacar la importancia de que la Política Agraria Común (PAC) cuente con los recursos financieros suficientes para afrontar los retos y oportunidades del sector agroalimentario, la importancia de trabajar en favor de la política de rentas y la necesidad de adaptación a las consecuencias del cambio climático en el sector del vino.

En concreto, ésta es una de las principales conclusiones del plenario del comité mixto del vino que se ha reunido en Madrid y que ha debatido sobre el diálogo estratégico de la agricultura de la Unión Europea y sobre las prioridades sectoriales ante la próxima Comisión y el nuevo Parlamento Europeo.

La reunión ha estado presidida por la secretaria general de Recursos Agrarios y Seguridad Alimentaria del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, Ana Rodríguez Castaño, el director general del Desempeño Económico y Ambiental de las Empresas del Ministerio de Agricultura, de la Soberanía Alimentaria, y Forestal de Francia, Philippe Duclaud, y el director general de Política Internacional y de la Unión Europea del Ministerio de Agricultura, de la Soberanía Alimentaria, y Forestal de Italia, Damiano Li Vecchi.

Durante el encuentro también se ha reflexionado sobre las medidas de promoción en el sector del vino, ya que destacan que es necesario un trabajo conjunto de los tres países para reducir la complejidad de la gestión y centrarse en nuevos mercados sin perder cuota en los ya establecidos. También apuestan por seguir trabajando en el fomento de un consumo responsable del vino a nivel europeo y mundial.

Respecto a la situación de la Intervención Sectorial del Vino se han analizado algunos de los problemas actuales como los procedimientos de puesta en marcha de las medidas de crisis en relación con la destilación, la cosecha en verde, o la necesidad de impulsar la promoción del vino. Además, se ha constatado la necesidad de flexibilizar el sistema de autorizaciones de viñedo, la puesta en marcha de medidas como el arranque y consensuar estas reflexiones y sus consecuencias con la Comisión Europea.

Así, los tres países están de acuerdo en que sea en el seno de la Unión Europea donde se garanticen las disposiciones presupuestarias suficientes que proporcionen instrumentos financieros adecuados para el sector, también mediante la reutilización de los remanentes.

De esta forma, consideran que el marco adecuado sería el Grupo de Alto Nivel de Política Vitivinícola (GANV) que actualmente está desarrollando la Comisión Europea y en el que participan representantes de las administraciones de los tres países.

Por último, en relación con el etiquetado digital y las barreras comerciales se ha acordado la necesidad de mejorar la implementación del actual marco normativo europeo para que se defienda plenamente la armonización de las normas y se garantice la libre circulación del mercado único de la Unión Europea.

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