Espera que haya "sentido común" en la negociación del convenio y paz social para que las plantas vascas sigan manteniendo la rentabilidad
BILBAO, 27 (EUROPA PRESS)
Tubacex afronta un 2024 de "transición" que será similar en resultados al pasado ejercicio para dar el "salto" en crecimiento en 2025, una apuesta que afronta con todas sus plantas vascas en rentabilidad desde el pasado año y sus responsables esperan que, en la negociación del convenio, haya "sentido común" y paz social para que se pueda mantener esta situación.
El CEO del grupo, Jesús Esmorís, y el presidente de la compañía, Manuel Moreu, han realizado esta reflexión sobre la evolución de Tubacex, que ha celebrado este jueves su junta general de accionistas en Bilbao en la que ha aprobado una remuneración de 0,0118 euros por título al accionista, un total de 14,5 millones.
En la junta se ha dado el visto bueno, por amplia mayoría, a todos los puntos incluidos en el orden del día, entre ellos, la ratificación del ex consejero delegado de Indra y de ITP Aero Ignacio Mataix como consejero independiente, o la aprobación de un plan de incentivos a largo plazo para los ejercicios que van desde 2024 a 2026.
También se han aprobado las cuentas de 2023, un ejercicio en el que la compañía obtuvo un beneficio neto atribuido de 36,3 millones en 2023, lo que supone un incremento del 79,5% con relación a los 20,2 millones registrados en el ejercicio precedente. Además, se alcanzó la cifra "récord" de 852,3 millones de ventas y se cerró con una posición de liquidez por encima de los 300 millones
En un encuentro previo con los medios de comunicación, Esmorís ha subrayado que en 2023 obtuvieron unos "resultados muy buenos" y la empresa concluyó con una situación financiera "sólida y robusta", con avances en su apuesta por la diversificación por sectores y con un cartera de 1.600 millones que les da "mucha tranquilidad de cara a los siguientes años". Todo ello en un entorno macroeconómico "no a favor" y, desde el punto de vista geopolítico, "complicado".
El pasado año también se procedió a revisar su plan estratégico tras haber alcanzado algunos de los objetivos previstos par 2005 y el nuevo Plan (NT2) abarca de 2024 a 2027, con una previsión de ingresos a su finalización de entre 1.200 y 1.400 millones, un Ebitda superior a los 200 millones y un ratio de endeudamiento por debajo de dos veces.
Esmorís, que ha recordado la transformación de Tubacex, que ha definido como una "historia de éxito", ha señalado que su objetivo es fabricar productos "complejos" para clientes "exigentes". Según ha apuntado, están en otra "liga", la 'Champions', donde hay pocos competidores, "dos o tres en el mundo".
Los responsables de la compañía se han marcado objetivos "ambiciosos", se muestran optimistas de cara al futuro y esperan "acelerar exponencialmente" su crecimiento en los próximos cuatro años, manteniendo la "solidez financiera y un balance saneado". "Va a ser una historia de éxito en los próximos años", ha añadido.
Entre los objetivos que se ha marcado, están ser líderes en sostenibilidad, una "clara" reducción de deuda, buscando una "estabilidad" del negocio a través de acuerdos plurianuales con clientes, la diversificación, y el mantenimiento de la competitividad, clave "si se quiere triunfar".
Para ello, apostará por tres negocios claves, por una parte, sus productos actuales. Esmorís ha destacado que han entrado en el sector aeronáutica, en el aeroespacial, además de volver al nuclear, donde ven "un futuro muy claro".
Tras subrayar que Tubacex está preparada para la transición energética, ha indicado que otro de los negocios es el de 'Lown carbon', donde también esperan un crecimiento importante porque la captura de CO2 va a requerir de sus materiales". También ha citado la importancia que tendrá el hidrógeno.
En la actualidad, el 43% de sus ventas provienen del sector oil&gas, cuya dependencia quieren reducir. Tubacex mantiene su objetivo de reducir la actual contribución del negocio del gas, como "energía de transición", hasta situar su exposición a estos sectores por debajo de un tercio de sus ventas al finalizar 2027.
Otro de los negocios tiene que ver con los "new business" y Esmorís ha defendido al combinación del crecimiento orgánico e inorgánico. "Seguimos planteando crecimiento vía inorgánica", ha señalado Esmorís que se ha mostrado convencido de que habrá adquisiciones.
El CEO de Tubacex ha señalado que, para que todo ello "cuadre", buscan socios financieros y ha citado el acuerdo anunciado en mayo para la incorporación de Mubadala Investment Company como socio en su negocio OCTG, que se valora en 400 millones de dólares. El acuerdo, pendiente de las pertinentes autorizaciones, contempla que Mubadala tenga una participación minoritaria del 49% en esta actividad, que conllevará poner en marcha una compañía en Oriente Medio.
"Son inyecciones de capital que son muy importantes para poder abordar este crecimiento", ha agregado. Además, en Oriente Medio también han logrado otro socio financiero para el negocio de Mecanizado, el fondo ADQ.
2024, AÑO DE TRANSICIÓN
Esmorís ha indicado para 2024 las perspectivas son "positivas" y va ser un año de "estabilización y consolidación" de lo conseguido en 2023, en el que esperan unos resultados similares a los de ese ejercicio, con una primera parte del año "más baja" y una segunda "más dinámica".
EL CEO de Tubacex cree que 2024 va a ser un año de "transición" para dar el "salto" en 2025, que será un año con "un incremento importante", ya que tienen "pedidos conseguidos" y, en concreto, ha citado el contrato con ADNOC, con "un valor mínimo garantizado" de 1.000 millones de dólares que deberían "ser bastantes más".
A finales de este año, se pondrá en marcha la planta de acabado y roscado de CRA OCTG en Abu Dabi para la ejecución del macro contrato, en la que ya han invertido 30 millones de los 100 millones previstos en este proyecto que, según ha manifestado, "reforzará" otras plantas como las vascas. Esta planta les aportará una facturación anual de entre 100 o 150 millones.
Esmorís ha destacado que en 2024 están incrementado su stock porque están fabricando productos que venderán en 2025 y que, por lo tanto, este año, no se reflejarán en la cuenta de resultados.
Asimismo, ha indicado que este año la cartera de pedidos se mantiene, además, con productos estratégicos. "Tenemos productos donde ya estamos llenos en 2024 y en el 2025, eso es algo histórico en Tubacex" ha agregado.
PLANTAS EN RENTABILIDAD
En su comparecencia, Esmorís ha destacado que la nueva apuesta estratégica que realizó Tubacex implicó "lamentablemente" una reestructuración porque suponía "mover menos toneladas" para centrarse en más productos premium, donde "siguen ganando cuota de mercado", pero ha asegurado que, a día de hoy, todas su plantas están "en rentabilidad".
Eso también incluye a las plantas vascas que también entraron en rentabilidad desde el pasado año y que siguen siendo, según han apuntado, las que tienen mayores salarios y absentismo. Esmorís ha recordado que previamente al Covid tenían un "problema" con estas plantas donde se perdía "mucho dinero", pero, con las medidas adoptadas, se ha dado vuelta a esa situación.
Esmorís ha indicado que esperan que se mantenga esa rentabilidad siempre que las "cosas se hagan con sentido común, de forma lógica" y con "paz social".
Precisamente, en estas plantas se debe negociar el nuevo convenio y esperan que puedan llegar a acuerdos "lógicos" y que haya "sentido común y responsabilidad". "Podemos poner más salario en Noruega, fenomenal pero después hay que competir", ha advertido.
Por último, ante los planes del Gobierno central de reducir la jornada, el presidente de Tubacex, que tiene una jornada inferior a la que se propone, espera que se haga "con cabeza y no se pongan palos en la rueda".