La agencia cree que será positiva para fabricantes como Ericsson o Nokia por la demanda de Estados Unidos y Asia
MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
La agencia de calificación crediticia Moody's no espera que los operadores de telecomunicaciones europeos registren un "importante" aumento en el gasto de capital en los próximos dos años ante la llegada del 5G, mientras que entre 2020 y 2025 el aumento de la inversión relacionado con la nueva tecnología móvil será "moderado", ya que prevé que el desarrollo del 5G sea gradual.
En un informe, Moody's prevé que la introducción del 5G no tenga impacto alguno en los ratings de los operadores de telecomunicaciones en Europa y considera que su despliegue se llevará a cabo en tres fases: un periodo inicial antes de su comercialización en 2020, una fase de evolución en los cinco años siguientes y una etapa "potencialmente más disruptiva" a partir de 2020.
"Los operadores europeos seguirán siendo prudentes en cuanto a inversiones hasta que haya claridad en los casos de negocio, que creemos que serán impulsados principalmente por las perspectivas de mayores ingresos, dada la limitada monetización de 4G y lecciones de 3G", subraya la agencia.
Moody's cree que el despliegue comercial en Europa del 5G no tendrá lugar hasta 2020, alrededor de dos años más tarde que en Estados Unidos y Asia. De la misma opinión son los operadores europeos, ya que, según una encuesta de la agencia, un 69% llevará a cabo el despliegue de nuevas redes cuando esté disponible comercialmente la nueva tecnología entre 2020 y 2025.
Por este motivo, Moody's no espera que en los próximos dos años se produzca un incremento "importante" del gasto de capital y cree que el espectro será el principal destino de las inversiones en esta etapa ,porque el 5G requerirá nuevas bandas no licenciadas. Sin embargo, estima que el gasto en esta fase será "moderado".
Por su parte, en el periodo 2020-2025 el sector se centrará en la mejora de sus actuales redes de 4G y en el despliegue selectivo de 5G. En este contexto, la agencia no espera un incremento "material" de los ingresos por 5G en este periodo, porque girará principalmente en torno a una banda ancha móvil mejorada, que en general será similar al 4G.
INCREMENTO MODERADO ENTRE 2020-2025
Moody's anticipa para este periodo un "moderado" incremento de la inversión debido a este enfoque gradual y a la ausencia de aplicaciones del 5G que lleven a un importante crecimiento de los ingresos, ya que, por ejemplo, la realidad aumentada o virtual no estarán lo suficientemente maduras para justificar casos de negocios. Además, agrega que esto ayudará además a mitigar la presión financiera sobre las compañías y su calidad crediticia.
Respecto al periodo posterior a 2025, señala que hay una "mayor incertidumbre" en torno a los ingresos y al gasto vinculado al 5G. Así, incide en que la nueva tecnología móvil podría requerir "significativas inversiones" a medidas que los operadores empleen para ella las bandas de frecuencias más altas, que requieren redes mas densas y más fibra para cumplir con exigencias del Internet de las Cosas (IoT).
Sin embargo, agrega que sigue sin estar claro si los ingresos adicionales que traiga el 5G serán suficientes para justificar esta inversión. "En consecuencia, las compañías probablemente tengan que compartir redes y podrían tener que cambiar sus modelos negocio para ir más allá de la conectividad tradicional", subraya Moody's.
Por otro lado, añade que la magnitud del incremento del gasto de capital dependerá de cada empresa. Así, cree que las mejor situadas son aquellas empresas integradas con planes de inversión en fibra bien definidos, como Swisscom, Orange, Telia, Koninklijke, Telefonica y Altice International. Por el contrario, las empresas de menor tamaño centradas en móvil que no cuentan con importantes infraestructuras de fibra, como Sunrise Communications, Play Communications, Wind Tre y Matterhorn Telecom, tendrán más dificultades.
PERSPECTIVA POSITIVA PARA ERICCSON Y NOKIA
En otro informe, Moody's destaca que la llegada del 5G tendrá un impacto positivo en la calidad crediticia de los principales proveedores de equipos de redes de telecomunicaciones europeos, como Ericsson y Nokia, ya que la demanda procedente de Estados Unidos, China y el Noreste de Asia en 2019-2020 les ayudará a tener mayores ingresos y márgenes antes de que se materialice en otras partes del mundo.
En su opinión, la evolución que se registrará en la eficiencia de las redes y en las actuales aplicaciones es positiva para estas empresas, porque debería animar la demanda a corto plazo, especialmente de operadores que buscan más capacidad o una eficiencia de costes.
En el largo plazo, durante la próxima década, el mayor potencial de ingresos vendrá de una segunda fase de aplicaciones como el IoT industrial y masivo, la realidad aumentada y los servicios de comunicaciones críticos. Sin embargo, Moody's advierte de que estas aplicaciones son diversas, no han sido probadas comercialmente y presentan diferentes desafíos y oportunidades, lo que hace difícil valorar actualmente sus implicaciones en su calidad crediticia.
En este contexto, añade que tanto Ericsson como Nokia han incrementado sus gastos en I+D en los últimos dos años, principalmente por el 5G, lo que ha elevado la calidad de sus productos y reducido los costes de servicio y producción de los más nuevos. Así, espera que ambas empresas mantenga elevados niveles de I+D al menos hasta 2020 a medida que siguen invirtiendo en aplicaciones para la segunda fase del 5G.