MADRID, 21 (EUROPA PRESS)
La compañía española Facephi se ha aliado con la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) para impulsar los viajes 100% digitales a través de billeteras digitales e identificación biométrica.
El proyecto, que ya se ha ejecutado, ha contado también con la colaboración de Cathay Pacific, el Aeropuerto Internacional de Hong Kong, el Aeropuerto Internacional de Narita y socios como Branchspace, NEC, Neoke, Northern Block y Sicpa.
Esta prueba, realizada en un entorno real, consistió en un vuelo de ida y vuelta entre los aeropuertos de Hong Kong y Tokyo Narita en el que dos pasajeros completaron el proceso de viaje únicamente con la presentación previa de las credenciales digitales y el uso de biometría.
Durante el viaje, los pasajeros usaron siete credenciales verificables, incluyendo pasaporte (e-Passport), 'selfie', visado, tarjeta corporativa, membresía como viajero frecuente, orden de viaje y tarjeta de embarque.
Estas credenciales digitales permitieron gestionar procesos en distintos puntos del aeropuerto mediante autenticación biométrica, sin necesidad de mostrar documentos físicos.
El papel de Facephi fue emitir las credenciales verificables. Así, emitió el Pasaporte DTC, es decir la 'Digital Travel Credencial'. Este documento se convirtió en la fuente autoritativa que respalda la emisión de las credenciales verificables que son enviadas directamente al wallet digital.
Además, Facephi generó una credencial biométrica en vivo ('selfie') y una tarjeta corporativa que facilitaron una experiencia de autenticación continua mediante biometría en distintos puntos de control del aeropuerto.
Las credenciales verificables emitidas por Facephi se integraron en los sistemas de autenticación biométrica de los aeropuertos de Hong Kong y Narita.
El proyecto tiene como objetivo mejorar el proceso de registro y verificación de identidad, volviéndose más rápido y seguro. Para que este proceso pueda realizarse, será necesario capturar automáticamente el documento del viajero, hacer un 'selfi'e para la verificación facial y llevar a cabo la comparación biométrica con la imagen del documento de identidad.
Una vez registrado, el pasajero puede acceder a los puntos de seguridad y puertas de embarque mediante reconocimiento facial. Esto significa que ya no será necesario mostrar documentos físicos (aún habrá que seguir portándolos), agilizando así de manera significativa todos los trámites.