MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
España necesita una inversión público-privada de 2 billones de euros para cumplir con el objetivo cero emisiones netas marcado para el año 2050, según un estudio elaborado por la consultora Bain & Company, que analiza los avances del país en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y los retos que enfrenta para alcanzar sus metas medioambientales.
El estudio también revela que España ha logrado reducir sus emisiones de CO2 en un 4,1% anual desde la entrada en vigor del Acuerdo de París en 2016.
No obstante, la consultora considera que España está lejos de alcanzar el objetivo del 55% de reducción de emisiones netas establecido en la COP21 para 2030.
En este sentido, el país "solo lograría en esa fecha una reducción del 32% respecto a las emisiones de 1990", según las proyecciones.
Las estimaciones de la consultora también indican que España llegaría a 2050 con, aproximadamente, 100 millones de toneladas equivalentes de CO2 (Mt CO2e), lo que supondría una reducción del 60% de emisiones respecto a 1990, por lo que se quedaría un 40% por debajo del objetivo.
DUPLICAR LA POTENCIA RENOVABLE
Los objetivos climáticos de España exigen un "gran compromiso" por parte de la Administración Pública, el sector privado y toda la sociedad, que pasa por aumentar la potencia renovable instalada hasta el 100% en 2050 (actualmente es del 59%) y por reducir la importación energética hasta el 13% (71% en 2020).
La consultora pone sobre la mesa que, mientras el Estado debe abordar una electrificación de sus carreteras, los sectores de la aviación y el transporte marítimo deben apostar por combustibles bajos en carbono.
En cuanto a los procesos industriales, el biogás, el biometano y el hidrógeno bajo en carbono podrían utilizarse, según Bain & Company, para reducir las emisiones en un 5%, al tiempo que también considera que se deberían reducir las emisiones y el consumo de energía en la construcción de viviendas.
El socio de Bain & Company Ibón García, ha señalado que el calentamiento global podría provocar pérdidas anuales de unos 21.000 millones de euros para la economía española hasta 2050, a la par que ha abogado por una colaboración público-privada para alcanzar con "éxito" los objetivos de descarbonización.
García ha detallado que es "fundamental" contar con un plan coordinado que incluya incentivos fiscales e informes de reducción de emisiones adaptados a la realidad industrial.